Tráfico en Valladolid

El Callejón de la Alcoholera gana una salida a la avenida de Zamora ante su crecimiento residencial

Los vecinos de las viviendas de este entorno, en el que ya está casi completado el nuevo desarrollo residencial de 463 viviendas de la denominada Ribera de Santo Domingo, situado antes del Puente de Hispanoamérica en dirección a la avenida de Salamanca, esperaban desde 2023 la decisión municipal para permitir una salida de los vehículos hacia la ronda interior sur. Hasta ahora solo estaba habilitada la entrada desde esta gran arteria de tráfico.

La solución que se ha adoptado en esta intersección pasa por mantener el carril de acceso al Callejón de la Alcoholera y generar otro canal de salida hacia la circunvalación al que se accede por la calle Clara Campoamor, la vía que discurre paralela al Pisuerga por la parte baja de la nueva zona de viviendas.

La reforma está recogida en un decreto firmado por el concejal Alberto Gutiérrez Alberca el pasado 11 de noviembre. En ese documento, se justifica que la modificación se deriva de la «expansión urbanística de los últimos años en los terrenos comprendidos entre el Callejón de la Alcoholera y el río Pisuerga y de la oportunidad que suponen las obras de ejecución de pasos para ciclistas que va a acometer el Servicio de Espacio Público e Infraestructuras en el entorno». Los operarios han ejecutado la señalización vertical, horizontal y semafórica de este cruce para ordenarlo con doble sentido de circulación y un carril por sentido para el tráfico rodado en el tramo comprendido entre la calle Clara Campoamor y la avenida de Zamora.

Hasta este reciente cambio, los conductores solo contaban con una vía de entrada desde la avenida de Zamora hacia la calle Guaraníes. Esa configuración obligaba a los coches que querían salir hacia la ronda a meterse por el entramado de vías de coexistencia de la urbanización de casas unifamiliares situada frente al Vallsur para salir al Camino Viejo de Simancas, primero, y desde ahí coger la circunvalación que lleva el tráfico bien hacia la avenida de Salamanca en sentido oeste o hacia la Carretera de Madrid en dirección este.

Hace ya un año, los técnicos consideraron viable esta opción ahora ejecutada, que se presentó en uno de los procesos de presupuestos participativos. El coste de la intervención se valoró entonces en 67.500 euros. La solución facilita no solo ese acceso directo hacia la avenida de Zamora, sino que servirá para pacificar el tráfico en el área de Valparaíso, cuya trama de calles a base de adoquines no estaba preparada para acoger un volumen de circulación como el que se comienza a registrar con la llegada de nuevas familias a esta zona de nueva factura, aún con algunos bloques en construcción.

Esta obra se ha llevado a cabo en paralelo con los trabajos de mejora del carril bici que discurre por la avenida de Zamora y que incluye los rebajes de aceras y medianas para mejorar la accesibilidad y las uniones con ese canal para las dos ruedas. En total se actuará en ocho intersecciones diseminadas a lo largo de los más de tres kilómetros de longitud de esta arteria. La actuación comenzó en octubre con el arreglo de los cuatro pasos de peatones, y sus conexiones con el carril bici, del cruce de la avenida de Zamora con el Callejón de la Alcoholera y la calle Villagarcía de Campos, justo antes del puente de Hispanoamérica.

La misma operación se llevará a cabo de manera progresiva en el resto de pasos de los otros siete cruces de la avenida de Zamora con el Camino Viejo de Simancas, el Paseo de Zorrilla, la avenida de El Norte de Castilla, la calle Vázquez de ­Menchaca, la calle Arca Real, la avenida de Madrid y la calle Annapurna, en el barrio de Pinar de Jalón.