Valladolid

Sólo el 0,3% paga en metálico en el regreso del efectivo a Auvasa

¿Cuál será el valor máximo del billete con el que se podrá pagar en el autobús? El concejal responde así a esta pregunta: «No hay límite en el sentido de pagar. Lo hay en el sentido de dar cambio. Si alguien nos quiere pagar con un billete de 50 euros, se acepta, pero no le podemos dar el cambio en el momento. A estas personas se las remitirá a las oficinas correspondientes para que se efectúe la devolución. Si se accede con un billete de 5 euros, por supuesto se dará el cambio en el mismo autobús», afirma Alberto Gutiérrez.

Hasta ahora, el billete ordinario se podía adquirir en quioscos y parquímetros y desde Auvasa se cree que el porcentaje de personas que pagarán en efectivo en el bus será similar al de los que antes adquirían el billete ordinario en estos establecimientos, que era «realmente bajo». El bonobús ordinario tiene un precio de 0,75 euros, pero con el descuento adicional del 50% está en 0,38 euros. Mientras, el pago en efectivo de un viaje en el autobús tiene un coste de 1,5 euros, lo que convierte esta opción en mucho más cara para el usuario final, por lo que se cree que la transacción en metálico será utilizada principalmente por viajeros ocasionales y turistas.

Los conductores de bus van a tener que volver a estar pendientes de los cambios, pero eso será un problema, según indica Pedro Velasco, director de autobuses de Auvasa. «Desde dentro se ve bien, en términos generales. El personal de conducción es el más afectado en este caso, porque son los que tiene que recoger los billetes y dar el cambio, y han acogido bien la propuesta», señala Velasco, quien ve el regreso del pago en efectivo como el adiós definitivo a las restricciones derivadas de la crisis sanitaria de la covid-19. «En cierto modo, esto supone la vuelta absoluta a la normalidad después de la pandemia. La situación ha cambiado mucho, tanto en los hábitos de movilidad como en los de pago, pero entendemos que recuperar el pago en efectivo es completar el paquete de medios de pago que tienen los usuarios», añade para señalar después que la incidencia de esta medida en los tiempos de las diferentes líneas será, a su juicio, insignificante. «La afección va a ser mínima porque ha habido un cambio de tendencia en cuanto los medios de pago. Hay muchas personas que ya hacen uso del móvil y de la tarjeta bancaria y esas personas seguirán usando estos medios», incide.

La opinión del comité de empresa va de la mano de la del director de autobuses. «Para nosotros supone una incomodidad como conductores, pero entendemos que es necesaria la implantación del efectivo porque supone una mejora en el servicio al ciudadano, que es lo que nosotros defendemos también. Ningún quiosco u otra fórmula de pago puede competir con el hecho de que un viajero acceda al autobús y consiga un billete de manera automática en el momento en el que lo necesita», explica Arturo Barrull, presidente del comité de empresa de Auvasa.

Los usuarios no se han mantenido ajenos a los cambios y hay opiniones de todos los colores. Por ejemplo, María Dolores Hernández tiene dos tarjetas de bonobús y la aplicación del teléfono, pero ve muy bien que se pueda pagar en metálico de nuevo. «Ya estábamos acostumbrados todos, pero me parece mucho mejor que se pueda pagar en efectivo. Yo he tenido que pagar a gente muchas veces porque si no, se quedaban en la calle. ¿Qué hacías si no tenías tarjeta de crédito?», se preguntaba esta mujer mientras esperaba la llegada del transporte público.

Otra de las opiniones que se pudieron escuchar en la parada del autobús fue la de María Luisa Novo, profesora de Matemáticas de la UVA, que se mostró contraria al regreso del pago en metálico porque cree que afectará a la velocidad comercial del servicio. «Me parece muy útil la tarjeta porque es muy rápida. Pienso que si se paga con dinero, se retrasa al conductor. Para lo único que esto me parece útil es para los turistas», apuntaba esta mujer tras bajarse del autobús en una céntrica parada.

Y así, entre opiniones de todos los tipos, los usuarios del autobús pueden pagar desde hoy su viaje en metálico, una medida que se ha anunciado en medio de la Semana de la Movilidad, que tendrá su día grande el próximo viernes con el Día sin Coche, por el que se cerrará al tráfico privado desde las 10:00 hasta las 22:00 horas en un área delimitada por las siguientes vías: calle San Quirce, Cardenal Torquemada, avenida de Sta. Teresa, calle Gondomar, calle Chancillería, Ramón y Cajal, Colón, Cardenal Mendoza, Pedro Barruecos, calle Alonso Pesquera, Plaza Cruz Verde, calle Labradores, calle Acibelas, calle Cadena, calle Vega, Plaza de España, calle Miguel Íscar, plaza de Zorrilla, paseo de Zorrilla, calle San Ildefonso y paseo de Isabel la Católica.

Durante el Día sin Coches, se pondrá en marcha una campaña destinada a fomentar los desplazamientos interurbanos en autobús, que ese día serán gratis con la única salvedad del pago del billete sencillo con tarjeta, que por motivos técnicos tendrá un precio de 1 céntimo de euro. Además, en el interior de los buses se pondrá a disposición de los viajeros de Auvasa una tirada de 3.000 ejemplares de periódico, con la idea de que los usuarios puedan ponerse al día con la información.