Las listas de espera quirúrgicas, tradicionalmente el gran problema de la asistencia pública, se dispararon además tras la inactividad que provocó la pandemia en 2020. Ahora, dos años después, los datos oficiales muestran una clara evolución positiva aunque todavía no se haya logrado reconquistar ... los datos de 2019, que también adolecían de suficientes resultados. Las demoras son más bajas que el año pasado, bastante más las medias autonómicas y buenos los datos, sobre todo, de las intervenciones de gran prioridad por su gravedad. La demora media autonómica es, no obstante, todavía de 123 días, 21 menos que en 2021. Es un 14,6% menor que en 2021 y un 19% menos que hace dos años. Diez de los catorce hospitales de Sacyl tienen demoras por debajo de los 100 días (cinco incluso de los 80), y solo cuatro registran cifras superiores a la media regional (Salamanca, León, Burgos y El Bierzo). El número de pacientes en espera estructural, es decir, la debida a falta de recursos y organización no por cuestiones médicas o retrasos voluntarios, se ha situado al acabar 2022 en 33.967 (42.221 en lista total, que incluye a los que han rechazado un centro alternativo o que no son programables por algún motivo clínico). En 2021 fueron 42.107 (48.680 en total); lo que supone un descenso de más de 8.000 pacientes, es decir, un 19,33 % menos.
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Cataratas, hernias inguinales y artrosis de rodilla, las de más demanda para operarse en la región
Eso sí, como en años anteriores, el rechazar la derivación a un centro privado pasa factura temporal y duplica el tiempo de espera. Los pacientes que no aceptan cirugías fuera de los hospitales públicos han de esperar una media de 251 días en Castilla y León frente a los 123 que aceptan la primera alternativa que les llegue. En algunos, como en Palencia y, sobre todo, en Zamora, el tiempo medio no empeora, pero en otros como en Burgos se dispara hasta los 410 en vez de 163. En Valladolid, el Río Hortega aumenta desde la media de 98 jornadas a la de 183 si se rechaza tal ofrecimiento y en el Clínico pasa de 86 a 154. Los complejos de la capital vallisoletana todavía arrastran pacientes con un año de espera para operarse, 116 entre ambos (en proporciones parecidas) y 755 supera el medio año de demora para entrar en quirófano. En la época prepandémica ya no se registraban casos que superaran los doce meses y eran 339 los que se retrasaban seis.
Más sobre listas de espera
Por especialidades, las que tienen menor demora media en la comunidad son Cirugía Cardiaca (103 pacientes y 49 días), Dermatología (186 pacientes y 35 días) y Ginecología (966 y 51 días), mientras que las que acumulan más esperas son Cirugía Plástica (1.341 pacientes en espera y 145 días), Neurocirugía (796 casos y 157 días de demora media), Traumatología (10.716 pacientes y 171 días) y Oftalmología (5.809 pacientes y 64 días).
Por diagnósticos, los cuatro procesos con mayor número de pacientes en espera de intervención a 31 de diciembre de 2022 han sido los siguientes: cataratas (4.706 pacientes), hernia inguinal (1.941), artrosis de rodilla (1.597) y deformaciones adquiridas de los dedos (1.235 pacientes).
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