Renault plantea un ERTE del 1 de agosto hasta final de año en todas sus plantas

Según la documentación que se entregó a los negociadores de los trabajadores, la aplicación del ERTE se realizará una vez agotados los descansos por bolsa y herramientas de flexibilidad del convenio colectivo, todo ello motivado por «las bajadas productivas de nuestra factoría y la crisis de los semiconductores».

La propuesta no ha pillado de sorpresa a las centrales sindicales. Desde Comisiones Obreras, su portavoz, Rubén González, lamentó la tramitación de un nuevo ERTE ante «un problema que no hemos generado nosotros y que Renault tiene que empezar a buscar soluciones que no sean a cargo de los trabajadores».

En este sindicato recuerdan que hace menos de un año se acordó un Plan Industrial 2021-2024 y un nuevo convenio colectivo. «Hay futuro para el mañana pero preocupación por el presente», resumió González.

El representante de CGT, Unai Hernández, defendió la necesidad de reclamar el «máximo de información de los contratos que está haciendo la empresa. «Hemos observado un gran número de contrataciones, posiblemente fraudulentas, que a los pocos días de su formalización son enviados de regulación a sus casas», denunció.

Esta central plantea como alternativa al ERTE un plan social (ya contemplado en un anexo del actual convenio colectivo) que establece medidas paliativas para evitar el expediente. «Algunas consisten en excedencias voluntarias de dos a cuatro años con una indemnización de 0,20 años de salario bruto por cada año de excedencia; o una reducción voluntaria del 50% del tiempo de trabajo percibiendo un 60% del salario», argumenta CGT.

Los sindicatos y la Dirección del Grupo Renault España Sociedad Anónima (GRESA) se volverán a sentar el viernes para plantear las condiciones de ampliación del ERTE. Esto supondrá que muchos trabajadores agoten la bolsa de horas, el comodín negociado entre ambas partes para adecuarse a los vaivenes de la producción. En ese caso, los afectados tendrán que soportar los efectos del nuevo expediente.

La constitución este miércoles de la Comisión Negociadora coincide con la decisión de Renault de adelantar otros calendarios con parones de la producción. Así, Palencia y las líneas de Valladolid conectadas con ella dejarán de producir a partir del próximo viernes y hasta el 30 de julio. En la práctica supondrá dejar casi sin actividad la factoría palentina hasta principios de septiembre ya que las tres primeras semanas de agosto la multinacional del Rombo cierra todas sus instalaciones.