Redes sociales sí, pero con cordura

«Lo primordial es la cordura», apuntó el periodista radiofónico de Onda Cero Javier Ruiz Taboada. El locutor participó en una mesa redonda acompañado de sus compañeros Alexis Martín Tamayo 'Misterchip' y Héctor Fernández, y del director de Comunicación de la Junta, Alejandro Salgado. A la cordura, Misterchip añadió tener las ideas muy claras, «y no tomártelo como algo personal. He tenido compañeros que se han salido en dos meses porque no aguantaban la crítica».

En este punto coincidió con Héctor Fernández, que añadió que «no es común que la gente te insulte. Lo que más abunda es el talento y la gente divertida». Eso sí, matizó, «hay que ser muy responsables con lo que contamos porque jugamos con los sentimientos de la gente».

Respecto a la saturación de las redes sociales, Ruiz Taboada quiso añadir que la realidad es que «la gente está saturada de la gente. Las redes sociales nos han traído lo mejor o lo peor de las personas. En Twitter España hay mucho ingenio, pero también hay mucho imbécil, y la gente está saturada de esos imbéciles».

Por su parte, Alejandro Salgado dio una visión más institucional del uso de las redes sociales. «Es muy importante diferenciar el trabajo que se hace por redes sociales desde una administración. Tú te diriges a unos ciudadanos, independientemente de que te hayan votado o no», explicó. A su juicio, las plataformas de participación ciudadanas, y las redes sociales para fomentarlo, «son imprescindibles».

Además de en la cordura, los cuatro coincidieron en que las redes sociales permiten amplificar los mensajes de las administraciones y medios de comunicación e interactuar con lectores y oyentes.«Son herramientas muy valiosas para los periódicos, las radios y las teles», apuntó Héctor Fernández. Eso sí, incidió Ruiz Taboada, sin caer en la perversión de que el periodista trabaje para la red social en lugar de para su medio».

Para finalizar la mesa redonda, que estuvo moderada por Julio González Calzada, delegado de El Norte de Castilla en Palencia, un súper usuario como Misterchip ofreció un consejo para no caer en el tedio de las redes sociales: «Si seleccionan bien el público a quien seguir, lo haces variado y metes un poco de humor, puedes conseguir que no te saturen las redes sociales».

El bloque 'Las fatigas en las redes sociales' comenzó con dos experiencias digitales desde dos empresas muy diferentes: Wallapop y Pepsico. Carlos Macho, 'content manager' de la aplicación de compra y venta de artículos de segunda mano entre particulares, explicó la estrategia de esta empresa, que se creó hace cuatro años y cuya 'app' ha conseguido ya más de cuarenta millones de descargas. Una estrategia que básicamente se basa en que los propios internautas sean los que compartan y, en algunos casos, creen, los contenidos y campañas de Wallapop. De una forma en la que los usuarios de la aplicación son los prescriptores de la marca. «Nuestra filosofía -explicó Carlos Macho- es que la tecnología, tal y como ha ido evolucionando, nos aleja de las relaciones personales. Queremos sacar a las personas y conectarlas para que vuelvan a salir a la calle».

En algunos casos, Wallapop ha utilizado a influencer (como el músico Lory Money) y, cuando estos han empezado a encarecer sus cachés, han optado por lo que denominan 'microinfluencer'; el propio ciudadano que se convierte en prescriptor de esta marca con sus tuits, vídeos e interacciones en redes sociales.

«Si no hay presupuesto, hay que aplicar creatividad, y destinar todo el recurso que tengamos a ser creativos y lanzar el mensaje adecuado a la persona adecuada», dijo tras repetir, en varias ocasiones, que el secreto de Wallapop es la autenticidad.

El uso de influencer y prescriptores de la marca también son estrategias que utiliza Pepsico en sus redes sociales. Aunque en este caso, según explicó Daniel Godoy, director de Marketing Digital en Pepsico Suroeste de Europa, aderezado con vídeos. «El tráfico en internet es bestial, pero el vídeo está tirando muchísimo.

El móvil ha cambiado nuestros hábitos de consumo, nos conectamos en todas partes», argumentó y ofreció sus claves para crear contenido potente: innovar, el poder la gente, compromiso y ser divertido.

Y finalizó con una visión de futuro: «En 2055, la mitad de los procesos van a estar automatizados vía robots y algoritmos. Pero no os preocupéis, el ser humano es muy inteligente e inventará otras fórmulas para que sigamos teniendo trabajo».