Valladolid

Tordesillas dice adiós a 178 años de historia de Tejidos Sigüenza

Alejandro Sigüenza fue quien comenzó con Tejidos Sigüenza tal y como se conoce actualmente. «Él fue alcalde de Tordesillas y era muy querido y conocido en la villa», relata su yerno, Carlos Campos. «Esta tienda de ahora de Tejidos Sigüenza era propiedad de Valentina Sigüenza y vendían loza, conservas. Mi suegro, Alejandro Sigüenza, se vino aquí cuando dejó el Ayuntamiento y desde entonces estamos aquí», recuerda Campos. La familia Sigüenza ha estado vinculada desde siempre al mundo de las telas y tal es así que en el pasado «confeccionaban los uniformes para el Ayuntamiento de Valladolid en la antigua Fábrica de Confección situada en esta misma calle y que llegó a tener 19 trabajadores».

«Nos dedicamos a paquetería, corsetería y telas, ese ha sido nuestro fuerte. Siempre buscando la actualidad. Tenemos marcas internacionales en todos los sectores que manejamos. Siempre hemos buscado la calidad de nuestros productos», precisa Carlos.

Con tantos años en la villa del Tratado y varias generaciones entre telas la noticia del cierre definitivo ha causado conmoción en Tordesillas: «La gente no se cree que cerremos, viven el cierre como algo suyo. Hemos visto llorar a muchos clientes. A nosotros también nos da pena, pero no hay relevo generacional, nuestras hijas tienen sus vidas. Una en Madrid y otra en Valladolid y tienen sus carreras y su trabajado forzado», explica el marido de María Rosa Sigüenza, propietaria del establecimiento en la actualidad.

«La relación con los clientes ha sido increíble, estamos muy agradecidos porque nunca hemos tenido ningún problema. De Tejidos Sigüenza no se ha ido nadie sin comprar nunca. Ha sido un viaje largo pero precioso y maravilloso», puntualiza Carlos, quien añade en cuanto al cierre definitivo, que se prevé para antes de verano: «Hemos aguantado un poco más de tiempo por si había algún interesado, pero no ha habido. El local no es nuestro, estamos en alquiler y pertenece a la otra parte de la familia».

El local ahora situado en el número 34 de la calle Santa María de Tordesillas esconde entre las cientos de cajas de género textil una historia que se remonta a decenios atrás. El emplazamiento es conocido como la Casa Contreras aunque nunca se ha sabido la razón de dicha denominación.

«La historia me la contó un heredero del Conde de Gamazo. Y es que este lugar pertenecía a la Condesa de Bornos. La Condesa ganó un juicio al Conde Gamazo en Boecillo y en pago de esa sentencia le correspondió esta casa que fue comprada por mi suegro Alejandro Sigüenza, cuando estaba como alcalde de Tordesillas para hacer Correos. Finalmente, el proyecto no se llevó a cabo y la familia se quedó con la propiedad para Tejidos Sigüenza», resalta Carlos Campos.