

Secciones
Servicios
Destacamos
La imaginación y la ilusión por inventar nuevas iniciativas junto a una constante voluntad de diversificar la oferta culinaria para hacerla más atractiva a los ... comensales han sido sin duda la bandera que ha ondeado en la gestión del restaurante El Rincón del Labrador de La Santa Espina. El 1 de febrero el emblemático establecimiento cerrará sus puestas después de 18 años durante los que se ha convertido en todo un referente de la mejor gastronomía rural de toda la región.
En un comunicado en redes durante esta semana, Fernando Martín y su esposa, Maite Pérez, han expresado que «ha llegado el momento de decir adiós». Una decisión que les ha sido muy difícil y con la que ponen fin a un negocio familiar «en el que hemos pretendido ofrecer un ambiente acogedor, un servicio de calidad y una cercanía con la que hemos tratado de haceros sentir lo más cómodos posible, para estar como en casa». En estos más de tres lustros, su vida, tanto personal como profesional, ha girado alrededor de El Rincón del Labrador, en el que «pusimos toda la ilusión en este proyecto en nuestro pequeño pueblo de La Santa Espina, con el que hemos aportado un granito de arena con la intención de potenciar el turismo rural y convertirnos en un referente de la cocina tradicional de temporada».
Fernando y Maite se sienten orgullosos «por todo lo que hemos sembrado y logrado», a la vez que «muy agradecidos con todos vosotros, clientes habituales, no habituales, amigos que habéis elegido nuestra casa como lugar de reunión, celebración y a los que tenemos gran cariño». Además, reconocen que su único objetivo con el cierre de su establecimiento es «mejorar la calidad de vida» y que, aunque cierren el restaurante, a partir de ahora se van a centrar en sus dos casas rurales de El Rincón del Labrador I y II en La Santa Espina, así como las casas gallegas Cabo do Mundo y Casa Escondida Aveiga, que tienen en la Ribeira Sacra. No se olvidaron Fernando y Maite de agradecer «a todos y a cada uno de los trabajadores que nos han acompañado estos años, y en especial a nuestra familia, que desde el minuto uno hasta el último día siempre han estado a nuestro lado apoyándonos y ayudando en todo momento».
Con la experiencia que dan 17 veranos siendo el responsable del restaurante Mi abuelo Lipe, en Isla (Cantabria), con 25 camareros y 7 cocineros a su cargo, Fernando Martín decidió abrir El Rincón del Labrador en 2005 en el pueblo que le vio nacer. En la memoria quedan el famoso plato estrella (con dos huevos fritos, patatas de sartén, chorizo y lomo), la deliciosa carne a la piedra, los pichones, las mollejas de lechazo a la sartén elaboradas con ajo y vino blanco de Rueda, los guisos, las alubias con níscalos, las diferentes ensaladas o los deliciosos postres caseros, entre otras muchas viandas, de las que dieron buena cuenta distinguidos comensales como el actor Imanol Arias, el periodista Luis del Olmo, el futbolista Ronaldo o el humorista Leo Harlem, sin olvidar las distintas plantillas de los primeros equipos de los clubes de Valladolid de fútbol, balonmano, baloncesto o rugby, que cada nueva temporada tenían una cita en el restaurante de Fernando y Maite para recargar las pilas.
Noticia Relacionada
En esa voluntad de inventar iniciativas, tampoco hay que olvidar las múltiples jornadas gastronómicas centradas en viandas como el marisco, los caracoles, los cangrejos o las setas, con miles de comensales que convirtieron a La Santa Espina cada año en cita obligada con la mejor gastronomía de temporada. Sabrosas viandas que se convirtieron en parte de los atractivos recursos de la localidad junto al entorno natural del pantano del río Bajoz o el monasterio cisterciense con sus claustros, la capitular, iglesia, museo de las mariposas o de los aperos. Y siempre con un deseo de darse a conocer y crecer que hizo que muchos años el restaurante contara con stand propio en la Feria Internacional del Turismo de Interior (Intur).
El alcalde de La Santa Espina, Luis Miguel Puerta, manifestaba su tristeza por la noticia ya que empezó su andadura como regidor casi a la vez que la de Fernando Martín con su restaurante, por lo que indicó que «se va algo mío». Además señaló su deseo de que haya posibilidad de que el negocio continúe y que «no se pierda la excelente prestación ni para los vecinos ni para los turistas». En este sentido destacó que «El Rincón del Labrador era archiconocido con turistas que venían solo al restaurante y luego veían el pueblo». Por eso, expresó que «habrá que reinventarse».
El pasado mes de septiembre, Fernando Martín recibió en La Santa Espina el premio Don Juan de Austria 2022 por su decidida apuesta por promocionar la gastronomía en el medio rural convirtiendo su restaurante El Rincón del Labrador en un referente de la restauración en la provincia de Valladolid. Martín entonces expresó que «detrás de este premio hay muchas horas de trabajo y mucha gente», señalando que «mi principal objetivo siempre ha sido trabajar por el turismo y la gastronomía defendiendo la tierra».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.