Valladolid

Peñaflor sale apagado o fuera de cobertura

La falta de cobertura de telefonía móvil es, desde hace años, una pesadilla para sus vecinos. «Es frustrante,» comenta Alfredo Baraja, vecino del pueblo y agricultor. «Para llamar a los proveedores tengo que subirme a la buhardilla de casa o irme hasta las eras del pueblo para poder tener alguna raya de cobertura. No podemos hacer llamadas importantes ni acceder a servicios básicos en línea. Es como si estuviéramos desconectados del mundo«, añade.

Su vecino José Cirilo Real, que también es agricultor se queja de la dificultad que tienen a la hora de realizar cualquier gestión de banca online. «Cuando nos envían el código de verificación por SMS es desesperante, porque o no llega o cuando llega ya se ha pasado el plazo de tiempo. Tenemos que ir por la calle con el móvil en alto a ver si en algún punto se coge cobertura. Es lamentable», comenta.

La economía local que se basa principalmente en empresas del sector primario y de servicios, se está viendo severamente afectada. «Nuestros negocios dependen de la comunicación constante con proveedores y clientes,» explica Carlos del Campo, gerente de Cereales Peñaflor. «Sin una buena cobertura, perdemos ventas, oportunidades. No podemos atender ni a nuestros clientes, ni a nuestros proveedores. Para hacer una llamada de un minuto, tenemos que hacer cinco intentos y siempre estamos ilocalizables. Eso no puede ser», prosigue este empresario que afirma estar «desesperado». Sus proveedores también lo están. Así lo atestigua Mercedes Morchón, comercial de Fertifluid, quien acude regularmente a Cereales Peñaflor. «Por teléfono es imposible localizarles y cuando vengo al pueblo, tampoco tengo cobertura, lo cual es un gran inconveniente para mi trabajo», comenta.

Los empresarios y profesionales peñaflorinos han elevado múltiples quejas al ayuntamiento y éste, a su vez, a las administraciones supralocales y a las compañías de telecomunicaciones, solicitando una solución urgente que nunca llega. «Nos sentimos olvidados», lamenta Juan Antonio Gutiérrez, alcalde del municipio. «Hemos mantenido innumerables reuniones con la Diputación y la Junta. Me consta que ellos están haciendo todo lo que pueden, pero todo depende de la empresa proveedora de servicios. La verdad es que no sabemos si la falta de cobertura puede deberse a los aerogeneradores que hay en el municipio», continúa el regidor, quien asegura que Peñaflor de Hornija ha estado durante siete años dirigiéndose a Movistar para solicitar la instalación de una antena de telefonía móvil que pusiera solución a los serios problemas de cobertura que tiene el pueblo.

Hace diez meses que la antena se ha instalado por parte de la empresa American Tower, pero nunca ha llegado a estar operativa y según dicen es debido a la falta de equipos por parte de Movistar. «Nos aseguran que nos van a instalar 5G, pero que debido a la falta de equipos la antena no se puede conectar. Hemos solicitado en incontables ocasiones la solución a este problema, pero hasta el momento no hemos recibido una respuesta satisfactoria», dice Gutiérrez quien también sufre en el Ayuntamiento los problemas de la desconexión móvil. «Cuando recibimos certificados de Correos tampoco podemos firmar el recibí electrónico. Es una pena que Peñaflor, que es un pueblo que tiene de todo, no tenga algo tan básico hoy en día como es la cobertura», justifica.

En la Residencia Peñaflor, los usuarios tampoco pueden recibir llamadas de sus familias en sus móviles particulares. «Los familiares optan por llamar al fijo para localizar a sus seres queridos. Otros usuarios que son más jóvenes y que están habituados a usar los móviles para jugar o ver las noticias tampoco pueden hacerlo», dice Fernando Puerta, director de la Residencia, quien también tiene dificultades en sus labores de gestión. Lo mismo que el farmacéutico, Carlos López, quien día sí y día también, se encuentra con serios problemas con su cobertura y también con su acceso wifi, lo que le dificulta la lectura de las tarjetas sanitarias de los clientes.

«Cuando esto nos pasa tenemos dos opciones. O adelanto los medicamentos porque conozco a todos los vecinos o les digo que vuelvan en un rato a ver si ya se ha repuesto el sistema», comenta el boticario peñaflorino. Su vecino Lorenzo González es jefe de cocina en el Palacio Condes de Gamazo de Boecillo. Todos los lunes, día en el que planifica los cuadrantes de los empleados y contacta con sus proveedores, se tiene que ir fuera del pueblo para poder hacer su trabajo. «Desde casa es imposible hacer ninguna gestión. Así no se puede estar», dice consternado. Begoña Vidal en su frutería está en las mismas. No puede llamar ni recibir llamadas. «Hoy tengo que cerrar el negocio por una cita médica que podía mantener telefónicamente. Los inconvenientes y pérdidas que esto nos supone son grandes», subraya.

Los peñaflorinos reclaman que la cobertura de telefonía móvil no es solo una comodidad, sino una necesidad básica que, cuando falta, afecta profundamente al bienestar de todos. Afortunadamente, según ha podido saber El Norte de Castilla, parece que el problema se solucionará pronto. Movistar (Telefónica) ha confirmado a este diario que hay priorizada como urgente una actuación para instalar el equipamiento «en pocos días», de forma que Peñaflor de Hornija dispondrá en breve, de cobertura 4G y 5G, de última generación.