Mueren un padre y su hijo menor, vecinos de Cuéllar, en un accidente en Peñafiel

Hasta el lugar de los hechos se desplazó una UVI móvil, una unidad de enfermería de emergencias, una ambulancia de soporte vital básico y personal sanitario de Atención Primaria del centro de salud de Peñafiel, así como varias patrullas de la Guardia Civil de Tráfico de Valladolid y de la Policía Local de Peñafiel. También se dio aviso a los Bomberos de la Diputación de Valladolid, que movilizaron varias dotaciones tanto de los parques de Peñafiel como de Íscar para excarcelar a los tres ocupantes del BMW.

Una vez allí, el personal sanitario solo pudo certificar el fallecimiento de Jesús García Mata –natural de Tordesillas, donde reside una parte de su familia, aunque está afincado desde hace años en Cuéllar– como de su hijo Iker. La menor que viajaba con ellos en el coche, de 12 años, tras ser atendida 'in situ' por los sanitarios, fue trasladada al Hospital Clínico Universitario de Valladolid capital, según informó el Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León.

El conductor del camión, un hombre de mediana edad, también resultó herido como consecuencia del brutal impacto. «Está ingresado en un hospital de Valladolid a la espera de operaciones; tiene golpes por todo el cuerpo, los dedos de las manos rotas, estamos pendientes también de las costillas y la pierna...», aseguraron este viernes desde la empresa gallega para la que trabaja, Transrolan Gorras, que también lamentaron «profundamente lo ocurrido». «Es una tragedia», continuaron.

El personal médico desplazado para socorrer a las víctimas del accidente también atendió a familiares de al menos uno de los ocupantes fallecidos en el turismo, que se desplazaron hasta el lugar del siniestro mortal, aunque los servicios de emergencia los mantuvieron a bastante distancia de los vehículos siniestrados. A pie de carretera, entre la cola de camiones retenidos, recibieron la triste y trágica noticia, siendo acompañados en todo momento por los sanitarios.

Como consecuencia del fuerte impacto, el turismo en el que viajaban las víctimas quedó cruzado en el carril izquierdo, en sentido Aranda de Duero. El tráiler también quedó en ese lado de la calzada en dirección al municipio burgalés, pero prácticamente fuera de la carretera, ya en el arcén, empotrado lateralmente contra el guardarraíl y ligeramente inclinada la caja del mismo.

Esta circunstancia motivó que se acordonara la zona de la cuneta próxima al lugar donde quedó el vehículo pesado. Asimismo, agentes de la Guardia Civil, tanto de los cuarteles de la comarca como de Tráfico, se encargaron de mantener la seguridad de la carretera, que permaneció cerrada al tráfico en ambos sentidos –la Dirección General de Tráfico fijó el nivel negro en la vía– durante aproximadamente dos horas y media, hasta las 4:30 horas, cuando se abrió la circulación con paso alternativo una vez que los operarios de mantenimiento de carreteras la despejaron la calzada y retiraron de la misma el aceite motor y otros líquidos derramados sobre el asfalto, puesto que son peligrosos para el tránsito viario. Finalmente, en torno a las 8:00 horas, según fuentes de la DGT, la carretera quedó totalmente abierta al tráfico. Al igual que el turismo, el camión requirió de una grúa para ser retirado del lugar del fatal siniestro.