Valladolid

Buscan en Traspinedo al autor del asesinato de un vecino del pueblo en Aranda

ACTUALIZADO: el presunto autor de los hechos ha sido detenido en Segovia.

Un jubilado de 72 años natural de la localidad vallisoletana de Traspinedo, Valentín López Sanz, es la persona que murió anoche en Aranda de Duero (Burgos) como consecuencia de una agresión en un portal. El suceso tuvo lugar poco antes de las 20:40 horas en el número 12 de la calle Benjamín Palencia, cuando el hombre fue atacado –en principio con un arma blanca– por otro varón que huyó del lugar.

Sobre esta persona, que según fuentes de la investigación sería el yerno del fallecido, pesa «una orden de busca y captura» en todo el territorio nacional, según ha confirmado el alcalde del municipio burgalés, Antonio Linaje. Y esa sería la razón del amplísimo despliegue de la Guardia Civil en Traspinedo, que ha estado tomado por los agentes durante catorce horas. De hecho, en algunos momentos han llegado a coincidir hasta cinco patrullas a la vez, según testigos presenciales.

Los agentes de la Benemérita se desplegaron en torno a las 23.30 de la noche de este jueves muy cerca del domicilio del vecino asesinado, ubicado en el número 17 de la calle Mayor y casi enfrente de la vivienda donde nació el fundador de las Edades del Hombre, José Velicia. Se situaron, en concreto, en la plaza Plazilla del municipio. Se trata de un punto estratégico, junto a la carretera de Valladolid, la parada del autobús, una sucursal bancaria y varios locales comerciales y de hostelería. Y ahí han estado durante toda la noche y hasta pasadas las 13:00 horas de hoy viernes.

La noticia de la muerte de Valentín López ha sido recibida con estupor en su municipio natal, del que salió siendo muy joven para trabajar en Aranda de Duero y donde residía junto a su esposa. No por eso había perdido la vinculación con Transpinedo, sino todo lo contrario: acudía con regularidad para participar en actos y eventos con sus quintos y por supuesto a los festejos patronales en honor de San Martín de Tours, cada 11 de noviembre. Tanto es así que hacía pocos días que había estado en la localidad, «si no ha sido esta semana ha sido la pasada», según confirmaba uno de sus familiares.

Quienes le conocían le definen como «una buena persona, muy afable», «un hombre muy majo» que hacía vida en su pueblo cuando acudía de visita. Uno de los lugares que frecuentaba «de vez en cuando» era el bar El Castillo, situado a pocos metros de su casa, donde los clientes se enteraban por este periódico del motivo de la presencia de las fuerzas de seguridad durante la madrugada, que tantos comentarios había suscitado durante la mañana en torno a la barra del establecimiento. La misma sorpresa expresaban también dos trabajadores del Mesón Molinero, ubicado en el cruce donde ejerció labores de vigilancia la Guardia Civil.

El fallecido tenía dos hijos, «una chica y un chico». Según fuentes de la investigación su muerte se habría producido después de que intentara mediar en la discusión que mantenían su hija y su yerno, que se encontraban en trámites de separación. El vallisoletano vivía a pocos minutos andando del hogar conyugal, en el barrio arandino de La Estación, que está conmocionado por el suceso. «Es una desgracia», lamentaba una vecina de la zona que no acertaba a calificar el crimen de otra forma. Testigos de lo ocurrido aseguraban que el presunto homicida se dio a la fuga tras herir fatalmente su suegro, al que asestó varias «cuchilladas». «Es demasiado fuerte todo», afirmaba otra joven que reside cerca del lugar.

José Antonio San Miguel López, primo carnal de Valentín, no ocultaba su pesar al enterarse de la pérdida de su pariente. «Tenía buena amistad con él» relataba, y recordaba que solía seguir los encierros a su lado en los soportales de la calle Mayor, tras la cancela de la vivienda del fallecido. Una consternación que también expresaba el alcalde de Traspinedo, Javier Fernández, quien recordaba que «era una persona de aquí que venía a menudo, sobre todo en fiestas, cuando era habitual verle en la procesión con su mujer», Felisa. El otro hijo de la familia, por cierto, se había instalado en el municipio hace un tiempo por motivos laborales.

• Temas
• Aranda de Duero
• Traspinedo
• Sucesos
• Sucesos en Valladolid