Buscan el rastro de Esther López en el Duero, cerca de la casa de Ramón G.

La Guardia Civil ha incrementado este lunes los efectivos destinados a intentar localizar alguna pista que le lleve hasta Esther López, la joven de Traspinedo de la que no se tienen pistas desde el pasado 13 de enero.

Durante la mañana de hoy -después de que el sábado se detuviera a Ramón G., de unos cuarenta años, por su presunta relación con los hechos- se han sumado a las tareas de búsqueda dos equipos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Benemérita, que trabajan desde primera hora en el río Duero. Sus labores se centran en una zona del cauce comprendida entre dos pesqueras, a pocos centenares de metros de la casa del detenido.

Mientras, de forma paralela, continúan desde las 9:30 los trabajos que se iniciaron ayer en el domicilio de R. G., único arrestado por su presunta relación con los hechos, y que lleva a cabo el Equipo Central de Inspecciones Oculares (ECIO) de la Guardia Civil. Así mismo, como ha sucedido durante las últimas jornadas, continúan las batidas con perros y un helicóptero y un dron realizan sobrevuelos por la zona en busca de algún elemento que haga avanzar la investigación.

El caso de la desaparición de Esther López mantiene en vilo a los vecinos de Traspinedo desde que el pasado lunes su familia decidiera denunciar su ausencia en el cuartel de la Guardia Civil.

Desde entonces se han llevado a cabo batidas diarias organizadas primero por los vecinos y el Ayuntamiento de la localidad y más tarde ya por la Guardia Civil con sus equipos especializados en este tipo de casos.

Desde que se dio la voz de alarma, cinco días después de que se le viera por última vez, el mayor avance conocido es la detención de R. G. en la tarde del sábado. Al parecer, este hombre de unos 40 años aseguró entre contradicciones haber hablado con la desaparecida varios días después de su desaparición.

• Temas
• Traspinedo
• Desaparición de Esther López