Más de 200 estrellas contra el cáncer en Rioseco

Cada una de las estrellas se monta con una estructura que tiene de base 16 perchas de plástico de color rojo unidas por bridas sobre la que se colocan adornos navideños de simulación como bayas de acebo con hojas verdes y guirnaldas. En total han sido 3.200 las perchas utilizadas para hacer 200 estrellas grandes, a las que se suman una veintena de más pequeñas realizadas con perchas pequeñas de color verde que, en especial, servirán para colocar en las puertas de las casas. La presidenta de la junta local de la AECC de Rioseco, Paqui Aranda, mostró su satisfacción por el gran éxito de la iniciativa, ya que «se han recibido muchos encargos». Además recordó que «todo lo recaudado será destinado para la investigación para ganar la batalla al cáncer».

La realización de estos adornos, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento riosecano y de la Asociación de Empresarios de la localidad, está precedida por acciones similares en los dos últimos años, que también tuvieron gran éxito, con guirnaldas verdes en 20121 y los paraguas del pasado años. Las estrellas, al precio de 12 euros las grandes y 10 las pequeñas, aún se pueden adquirir, en especial a partir de la tarde de este jueves cuando las voluntarias de la junta local de la AECC inauguren el rastrillo navideño solidario que, al igual que los últimos años, abrirá sus puertas en un céntrico establecimiento de la calle Mayor.

Juguetes, bisutería, ropa, libros, vasos, fuentes, platos, relojes, espejos, marcos de fotografía, bolsos, adornos, o cuadros son sólo algunos de los cientos de objetos que se podrán adquirir por un donativo en este pequeño mercadillo solidario que estará abierto en horario de mañana y tarde, de lunes a viernes, y el sábado por las mañanas, hasta el 22 de diciembre. No faltarán los adornos navideños realizados de forma artesanal por las voluntarias de la asociación. Además, quien lo desee podrá colaborar con la degustación de un sabroso café con bizcocho. Paqui Aranda agradeció el trabajo altruista del grupo de colaboradoras «realizando durante todo el año una labor impagable».

Aranda y su grupo de voluntarias llevan a cabo en Medina de Rioseco durante el todo año una importante labor solidaria, unas veces buscando la prevención con actividades como sus Jornadas de Educación para la Salud, otras la atención psicológica a enfermos y familiares, sin olvidar las que persiguen conseguir fondos, como en el caso de los mercadillos, las machas a pie, la venta de lotería de Navidad o las mesas petitorias.