Presión vecinal contra la tala de árboles en el Camino del Cementerio

Los trabajadores comenzaron el pasado jueves con la tala de los primeros ejemplares, algunos con hasta ochenta años de vida, apuntan los vecinos. Desde entonces, los tocones se acercan a la veintena, y en la acera del ambulatorio solo quedan en pie los árboles de mayores dimensiones y los que se ubican en la parte más cercana a la calzada. Este lunes, los operarios han comenzado su jornada laboral colocando las baldosas en la acera donde antes se encontraban los árboles. Sobre el suelo, el renovado pavimento muestra su antigua ubicación. «Se podrían haber pensado antes en muchas otras alternativas, talar los árboles tiene que ser la última solución», apunta Demetrio Saster, vicepresidente de la Asociación Vecinal '24 de diciembre' barrio Belén.

Han sido los vecinos del entorno los que este lunes han salido a la calle para presionar e intentar evitar que continuara la tala de árboles en el Camino del Cementerio, donde se prevé que se retiren 34 ejemplares durante estos días. Según los operarios, solo en la acera del nuevo ambulatorio, mientras que en el lado contrario solo se procederá a la poda de los árboles existentes. Los vecinos critican que se haya tomado la decisión sin consultarles y acusan al Ayuntamiento de no haber buscado otra solución. «Alternativas hay, porque se puede jugar con el retranqueo de la fachada. En cualquier caso, la tala tiene que ser la última solución», reiteran.

Según apuntaba el Ayuntamiento, la tala corresponde con la facilitación del acceso al centro de salud de La Magdalena, que se levanta en una parcela del Camino del Cementerio. Aquí, la acera se intercala con la presencia de varios bancos y los árboles que se han talado, a lo que se suma la presencia de un carril bici de doble dirección. Un paso ciclista compartido es otra de las alternativas que apuntan los vecinos de la zona, que también critican la falta de información desde el Consistorio. «Es una vergüenza, porque no nos han avisado. Nos despertamos un día y vimos que habían empezado a talar, pero no hemos obtenido ninguna respuesta».

Para intentar frenar la situación, los vecinos se han congregado dos veces este lunes -a las nueve de la mañana y a las tres de la tarde- y también han procedido a colocar carteles en los ejemplares que todavía permanecen en pie, con mensajes como «Aquí hay árboles singulares», «No me mates» o «SOS árboles del Camino del Cementerio». «El urbanismo, que también es solución, ahora se ha convertido en verdugo», zanjan desde la asociación. También han escrito mensajes sobre los tocones, como «Ya me mataste». En total, el Camino del Cementerio perderá una treintena de ejemplares que durante décadas han dado sombra a los vecinos del barrio.