La plaza de la Ciudad de la Comunicación ve la luz 20 años después del nacimiento del barrio

Las obras de urbanización de la plaza de la Ciudad de la Comunicación, sin la 'geoda', comenzaron a principios de mes y ya muestran avances significativos sobre las dimensiones de este amplio espacio de 1,3 hectáreas destinado, en efecto, a vertebrar el tránsito peatonal (sin los túneles y pasarelas proyectadas en su momento) en el epicentro de un barrio que alberga ya casi la mitad de las viviendas previstas (900) y que en un plazo de un par de años casi colgará por fin el cartel de completo.

La plaza de la 'geoda', por mantener su denominación inicial, ocupa un amplio terreno delimitado por el paseo del Arco de Ladrillo (en la prolongación del paseo de Farnesio) y las calles Guadalajara, Boston y Adolfo Suárez, que acogerá tres itinerarios peatonales pavimentados en torno a un pequeño lago artificial rodeado de espacios verdes con arbolado y áreas de juegos infantiles y de gimnasia para mayores. Todo ello a falta de la decisión definitiva sobre la estructura que ocupará el espacio de la 'geoda', una suerte de pérgola semiesférica de 10,4 metros de diámetro, cuya construcción quedó desierta en el último concurso por el elevado coste de los materiales para su ejecución. «La idea es volver a sacar adelante un elemento singular en la plaza, sea la 'geoda' u otra estructura, para que salga de nuevo a concurso», anticipa el concejal de Planeamiento, Manuel Saravia. Esa suerte de pérgola, o lo que finalmente se decida, estaría destinada a acoger actividades culturales.

Las obras de urbanización en sí de la plaza fueron adjudicadas el 27 de julio de este mismo año con un presupuesto para su ejecución de 1,5 millones y un plazo de ejecución de seis meses a contar desde principios del presente mes de noviembre, es decir, que los primeros peatones podrían pisar la nueva 'plaza jardín' de la Ciudad de la Comunicación en torno al mes de mayo del año que viene.

La construcción del ágora avanza ahora con los movimientos de tierra a cargo de maquinaria pesada y el acopio de materiales para dibujar sus futuros viales, que conectarán el paseo del Arco de Ladrillo con la sede de la Tesorería de la Seguridad Social. No habrá túneles bajo la plaza ni pasarelas aéreas hacia la avenida de Irún y la calle Puente Colgante (esta última podría salir adelante en un futuro desde el terreno de uso comercial situado al borde de la plaza), tal y como preveía el proyecto original de 1999, que contemplaba entonces un presupuesto global de 50.000 millones de pesetas (unos 300 millones de euros) a ejecutar en un benévolo plazo de tan solo cinco años.

Aquellas infraestructuras, destinadas a salvar la vía férrea, serán sustituidas en el marco del actual proyecto de integración ferroviaria, que prevé habilitar seis nuevos pasos subterráneos y elevados bajo las vías en torno a la Ciudad de la Comunicación y el parque de Las Norias, desde el proyectado a costa de la demolición del actual viaducto de Arco de Ladrillo hasta el situado al final del citado parque, donde se construirá una pasarela para peatones y ciclistas que desembocará en la calle Luna (barrio de La Farola).

Entre medias, coincidiendo con los viales de la Ciudad de la Comunicación, se habilitarán un paso inferior para peatones y ciclistas entre Ariza y Gabilondo, un túnel de dos carriles para coches entre Adolfo Suárez e Hípica y otro paso inferior en sustitución de la actual pasarela que une el parque de Las Norias y el camino de La Esperanza. Al lado de la futura plaza de la 'geoda' se mantiene en el aire, como casi único vestigio del proyecto de 1999, la posibilidad de habilitar una amplia pasarela peatonal desde el terreno colindante de uso comercial, en el que en su día se llegó a anunciar la construcción del centro comercial Scena (nunca vio la luz), hasta la calle Puente Colgante. Del uso del solar dependerá su posible construcción.

El proyecto original presentado hace 23 años, en aquel 27 de abril de 1999, incluía no solo la plaza de la 'geoda', que verá la luz definitivamente antes del verano de 2023, y el fallido centro comercial Scena sino también, entre otros, la construcción de un museo del cine (iba a contar, incluso, con platós que se alquilarían a las productoras) y de una nueva sede territorial de Radio Televisión Española. Los únicos edificios que sí se construyeron fueron los de la actual sede de la Tesorería de la Seguridad Social y un enorme apartahotel, bautizado como Doña Leonor, situado a continuación, que perdió su uso como tal años atrás y que en los últimos meses ha intentado venderse como viviendas.