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El Palacio de los Miranda ya muestra la distribución de sus pisos de lujoLas obras en el Palacio de los Miranda –histórico edificio enclavado en el número dos de la calle Santuario con vuelta a Enrique IV, junto a la plaza del Salvador– avanzan para reconvertir el interior del inmueble en viviendas de lujo. Sobre las plantas anteriormente ... diáfanas del edificio ya se observa la distribución de los futuros pisos, donde están dispuestos los suelos que cubrirán los pasillos de acceso a las casas. En total albergará nueve viviendas, cinco de ellas organizadas como dúplex y el resto como hogares de uno a tres dormitorios. Aún con los interiores huecos, ya se observa el esqueleto de las futuras residencias de lujo, así como de los dos locales destinados a negocios ubicados en la planta baja.
Dentro de la casa renacentista, que data del siglo XVI, se puede ver el patio de estilo toscano con techo de cristalera, que ha quedado intacto después de la reforma y que se construyó después de su restauración a inicios de este siglo. Del edificio original solo se mantiene parte de la fachada, con la puerta principal como único testigo del paso de la historia.
La protección patrimonial adquirida por el palacio no permite modificar la fachada exterior, que con la rehabilitación actual solo sufrirá mejoras en términos de rendimiento energético, pero que mantendrá la misma forma, número y tamaño de los huecos que existían antes del comienzo de la obra.
Los precios de las viviendas oscilan entre los 341.933 euros y alcanzan los 773.410 para uno de los dúplex. Las superficies útiles, desde los 64,76 metros cuadrados para la más pequeña -y la más barata- y hasta los 143,83 en la más amplia. El resto de dúplex oscilará entre los 565.357 euros y los 677.635 euros, con precios escalados en función del número de baños, habitaciones y de superficie. El inmueble también cuenta con 54 plazas de garaje, destinadas a los futuros inquilinos, pero que también dejará espacio para alquileres y compras de otras personas interesadas. De hecho, algunas plazas de aparcamiento, que está abierto y al que se accede desde rampa por la calle Enrique IV, ya están ocupadas desde antes de la aprobación del proyecto.
La primera previsión marcaba la entrega de llaves de cara a final de este año, si bien debido a diversos retrasos, ahora la fecha se ha trasladado hasta primavera de 2024. Desde Engels & Völkers, comercializadora de las viviendas, afirman que ya se han vendido tres de las nueve disponibles. Estas corresponden a uno de los cinco dúplex y a dos casas, la de un dormitorio y una de tres habitaciones. Además, desde la inmobiliaria también confirman que por el momento no hay comprador para ninguno de los dos locales de la planta baja, sin que tampoco se descarte que con el tiempo puedan ser reconvertidos en residencias, en función del futuro que puedan tener como negocios.
El interior del edificio no será público, a excepción de los futuros negocios, a donde se accederá desde las dos vías donde hace esquina el palacio, Santuario y Enrique IV. El resto del inmueble será de uso privado para los vecinos, también el patio, que será una de las zonas comunes de los propietarios. Desde allí se accederá a las viviendas, dos de las cuales tendrán vistas al interior del inmueble y al exterior. La mayor dificultad a la hora de acometer la reforma, explican desde el estudio de arquitectura U-rb Atelier, socia del proyecto, ha sido complementar la estructura del edificio con la nueva tecnología que se implementará en el edificio, enmarcado en un innovador proyecto europeo. Según las mismas fuentes, las obras se centran ahora en las viviendas, con la primera planta ya distribuida y ahora trabajando en el cierre de los techos del segundo y tercer nivel.
Un edificio que genera energía a través de paneles solares y reparte el excedente a la red eléctrica. El Palacio de los Miranda se engloba dentro el proyecto europeo Excess, un programa donde participan cuatro inmuebles en Europa, cada uno establecido en una zona climática distinta. Valladolid es el representante del mediterráneo, después de que la iniciativa no se aprobara a tiempo en otro inmueble ubicado en la ciudad de Granada. La mayor diferencia del palacio de los Miranda con el resto de edificios que sirven como piloto para el proyecto es que es uno histórico y que se convertirá en un edificio de energía positiva, consume menos de la que gasta. El resto corresponden con viviendas de nueva construcción, en Finlandia; sociales en Bélgica; y un silo, en Austria, que se transformará en un hotel.
Una vez comiencen a vivir los primeros inquilinos, el plan estudiará a lo largo de un año el consumo eléctrico del edificio. El objetivo, conseguir inmuebles que produzcan más energía de la que consumen gracias a la ayuda de 131 paneles fotovoltaicos que se colocarán en la cubierta del palacio. Será además un edificio inteligente, con una ventilación continúa para garantizar la calidad del aire y con sensores de Co2. Para gestionar el excedente de energía en los meses de alta producción de energía solar, se instalarán en el interior baterías con una capacidad de 30 kWh. De manera automática, el edificio aprenderá los patrones de consumo eléctrico, para luego decidir el comportamiento óptimo desde el punto de vista económico de la instalación. Si bien almacenarlo o verterlo en la red eléctrica.
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