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María López
Valladolid
Lunes, 22 de julio 2024, 19:47
Como todos los veranos desde hace unos años, los hermanos Bernardino y Andrés Caramazana, junto a sus respectivas mujeres, Isabel Gil y María Victoria González, disfrutan de una semana de vacaciones, playa y sol radiante en Benidorm.
Con el equipaje de toda la semana a ... las espaldas y de camino a coger un taxi que les acercara a la estación de Alicante para coger un tren 'low cost' de vuelta a Valladolid, Bernardino, al que todo el mundo llama Nino, se entera gracias a su hijo Rubén, quien les había comprado los billetes, de que el regreso a casa tendrá que esperar, ya que su tren se había cancelado debido a una incidencia técnica. «A las dos menos diez recibo un correo de Ouigo avisándome de que el tren que tenían que coger mis padres con salida a las 17:52 de Alicante destino Valladolid se cancela debido a una incidencia técnica», relata Rubén Caramazana, quién recibió este aviso con cuatro horas de antelación. No tardó ni un segundo en avisar a sus padres, quienes, por suerte, todavía no se habían subido al taxi que les llevaría a la estación.
«Si llegamos a ir con el equipaje y todo, menuda nos preparaban», explica con un tono algo molesto Nino, quien lamenta que se han visto «tirados por completo». El hotel lo tenían reservado desde principios de febrero «porque es un viaje que hacemos todos los años y así los precios son más asequibles, pero claro, no teníamos más días reservados porque hoy nos marchábamos. Cuando hemos vuelto a preguntar si tenían un par de habitaciones libres, hemos tenido suerte y nos han dicho que sí, pero cada una de ellas por un precio de 127 euros solo por dormir, sin incluir las comidas».
Para quitarle un poco de hierro al asunto, este vecino de Valladolid cuenta entre risas que era la primera vez que realizaban este viaje en tren. «Siempre lo habíamos hecho en coche, pero este año, con los trenes tan baratos, pensamos que sería más cómodo y que también nos daría una mayor tranquilidad, pero claro, ahora nos hemos quedado tirados por completo», insiste. «Estábamos de vacaciones y vienes a despreocuparte y desconectar, y pasa esto y no te quedas igual. Esta tarde teníamos que estar en Valladolid. Yo mismo tenía mañana una revisión del médico y mi hermano tiene la boda de su hija este fin de semana y tiene cosas que preparar». Eso sí, «ahora nos preparemos y bajaremos a la playa, ya que estamos aquí», bromea.
Por su parte, la operadora de alta velocidad Ouigo notificó mediante correo electrónico la cancelación del viaje Alicante-Valladolid Campo Grande a todos los usuarios afectados del trayecto justificando que se trataba de «una incidencia técnica», aunque sin especificar cuál. Este periódico ha tratado sin éxito de ponerse en contacto con la compañía para concretar qué tipo de incidencia ha registrado el tren y el número de afectados.
En el mismo mensaje que la compañía compartió con la familia vallisoletana, se ofrecían dos alternativas: la primera consistía en cambiar la fecha del viaje dentro de un plazo de 30 días de forma gratuita y sin cargos. Además, en caso de que el precio del billete fuera superior al inicial, no se pagaría la diferencia del mismo. La otra opción sería la de un reembolso del importe del trayecto afectado debido a la cancelación, teniendo la posibilidad de solicitarlo en forma de vale de compra o a través de un crédito en la misma tarjeta de compra del billete.
Rubén, que compró los billetes para sus padres, reconoce que «no es la mejor solución, pero es algo. No sé muy bien si es por política de la empresa o es una norma general, pero si te avisan con menos de cuatro horas de antelación, te dan el doble del importe del billete. En nuestro caso, todos los billetes costaron un total de 100 euros, por lo que les han dado 200. Es algo, pero en este caso sigue siendo menos de lo que les ha costado las habitaciones de hotel que tienen que pagar por estar una noche más».
A pesar de esta incidencia, que nunca antes habían vivido «pese a viajar bastante a menudo en tren», reconoce que «el sistema funciona bastante bien» pero considera que el problema estriba en la poca cantidad de trenes que dispone la compañía hasta el momento. «Es el único trayecto que realizan para cubrir este servicio. Entonces, en cuanto hay un problema como este, no tienen otras alternativas», lamenta el joven. De momento, lo que sí tienen confirmado es que su familia podrá volver mañana en el tren que sale a la misma hora, siempre y cuando no haya una nueva «incidencia técnica».
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