Un marzo pasado por agua dispara el superávit hídrico del año en Valladolid

El mes pasado estuvo marcado, en efecto, por los vaivenes meteorológicos, pero no solo vinculados a los temporales, que también, sino también a los del mercurio, con un veranillo adosado entre temporales que registró la temperatura máxima más alta alcanzada jamás en este mes en la capital, con unos inéditos 26,6 grados registrados el día 22. Por entonces se superaron los veinte grados durante cinco días consecutivos (entre el 18 y el 22).

Pero también hizo frío, sobre todo, al comienzo del mes (con dos días de haladas) y al final, también coincidiendo con la Semana de Pasión, con unos atípicos 4,9 grados de temperatura media alcanzados el Martes Santo, cuando nevó a última hora de la tarde. Ahí comenzó la sucesión de días de lluvias que no cesó hasta el domingo (de Resurrección), cuando una granizada –registrada a las 14:45 horas en puntos dispersos de la capital– puso fin a las precipitaciones, que dejaron 31,4 litros por metro cuadrado en esas seis jornadas. Esta cantidad elevó hasta los 67,6 litros el volumen recogido durante todo el mes, más del doble de lo habitual (32), según reflejan los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Así que marzo, por un lado, fue muy lluvioso y, por otro, ligeramente más cálido de lo habitual pese a esos periodos de frío que abrieron y cerraron un mes que concluyó con una temperatura media de 9,7 grados, apenas 0,6 grados por encima de lo normal para Valladolid (9,1), con una mínima de -0,8 grados, registrada el día 6, y la máxima de 26,6 (el 22).

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Y todo ello en la línea de los meses anteriores, que también fueron mucho más lluviosos de lo habitual y muchísimo más cálidos. De manera que el primer trimestre del año concluye con un más que llamativo superávit de precipitaciones, que deja 182,2 litros por metros cuadrado, repartidos entre los 67,6 de marzo, los 46 de febrero y los 68,6 de enero, una cantidad que supone ya el 42% de lo esperado para el conjunto del año (433 litros) en Valladolid. Y estos primeros tres meses de 2024 también suman una temperatura media muy superior a la normal, con 8,2 grados, 1,7 por encima de lo habitual para el trimestre.

Las previsiones apuntan a que abril arrancará con menos lluvias, al menos en el inicio de esta semana (aún se esperan precipitaciones hasta el martes), y con un acusado incremento de las temperaturas, que elevará el mercurio hasta superar los veinte grados a partir del próximo miércoles -después se atisban más precipitaciones-, lo que augura un deshielo que incrementará aún más los caudales de los ríos de la provincia.