Lindorff culpa a la concentración bancaria para justificar el despido de 449 empleados

Así se lo trasladaron los representantes de la dirección a los sindicatos CGT, Comisiones Obreras y UGT, que este martes han iniciado las conversaciones sobre el ERE que pretende aplicar la empresa durante este 2018. La compañía ha iniciado dos procesos de fusión, uno nacional con Aktua Soluciones Inmobiliarias y Financieras, y otro internacional, con Intrum Justitia, con los que pretende 'ajustar' las dimensiones de sus actuales plantillas. Alega por ello razones organizativas y productivas.

Durante el encuentro, los técnicos de Lindorff explicaron que la tendencia a la baja de la morosidad en la banca española está reduciendo los encargos de los bancos para el recobro de las deudas, principalmente préstamos personales al consumo.

En este sentido, la dirección insistió en que ha aumentado la competencia en el sector de recobros con la creación de pequeñas compañías y la entrada en el mercado de despachos de abogados. Ello habría provocado una bajada de las tarifas que se venían aplicando a los bancos.

Además, la compañía, pese haber facturado entre los años 2016 y 2017 250 millones de euros en España, plantea que sus clientes bancarios se han reducido significativamente, pasando de 62 en el 2008 a once el pasado año.

Ante el anuncio de previsión de la bajada de su actividad, los sindicatos han pedido a Lindorff que aporte cuáles son los contratos mercantiles que tiene con las entidades financieras.

"Aluden a una caída de ingresos como previsiones para 2018, pero no podemos confiar en meras tendencias para despedir a 449 personas", explicó Jaime Esteban, delegado de CGT, que denunció que la empresa no está dispuesta a facilitar la labor sindical entregando documentación al respecto de las tres compañías afectadas por este ERE.

Las quejas sindicales obligaron a Lindorff a acceder a que los representantes de los trabajadores puedan comprobar la misma mediante tres ordenadores, pero sin facilitar copia alguna de los contratos que tienen con sus clientes.

Será la semana que viene en el centro de Madrid, donde con vigilantes de seguridad presentes en una sala se podrá ver dicha documentación. La empresa alude a una claúsula de confidencialidad para no entregar copias de esa información.

Tras la reunión, UGT criticó que Lindorff "pretenda realizar despidos preventivos y cerrar dos centros de trabajo, inventando causas que ni si quiera la ley de Reforma Laboral de 2012 contempla".

Las organizaciones sindicales han solicitado la inmediata retirada del expediente, porque no se puede despedir legalmente por "una presumible pérdida de contratos".

Mientras tanto, para mañana miércoles 28, se mantienen los paros de mañana y tarde en la sede de Lindorff del polígono de La Mora en La Cistérniga, donde trabajan 685 empleados.

El comité de empresa, que ha cuestionado la buena fe negociadora por parte de la dirección, aprovechará los mismos para informar a los trabajadores de la posición empresarial. La próxima reunión será después de Semana Santa, el 4 de abril en Madrid.