Largas colas en RÍO Shopping en el primer fin de semana con los centros comerciales abiertos en Valladolid

Las entradas al centro comercial estaban guiadas con unos pivotes con cintas que obligaban a guardar cola, con control además por parte de personal (que también en el interior velaba, con una gran presencia, el cumplimiento de las normas de seguridad y distancia). Además, tal y como se informa a través de unos carteles en las puertas, hay cámaras de vídeo que controlan los accesos, para regular los flujos de clientes que entran a las instalaciones.

En algunas tiendas del interior también ha habido controles para entrar en cada uno de los establecimientos y, en algunos casos, como Primark, tuvieron que impedir de forma temporal la entrada de nuevos compradores debido a que se ya había completado el aforo disponible. A última hora de la mañana, cerca de cien personas esperaban turno para poder entrar en la tienda e incluso la cola se extendía al exterior del centro comercial, con un espacio exclusivo de espera para los clientes que querían acceder a Primark.

También había largas colas en la zona de restauración, con compradores que aguardaban para acceder a alguno de los restaurantes. Y los aparcamientos presentaban una alta ocupación.

Este es el primer fin de semana en el que los centros comerciales han podido abrir sus puertas, después de que su interior permaneciera cerrado debido a las restricciones impuestas por el Gobierno regional para hacer frente a la tercera ola del coronavirus. Desde el pasado lunes, se levantaron algunas de estas medidas y ya pudieron abrir los centros comerciales, con aforo limitado a un tercio, según el acuerdo del 3 de noviembre de 2020 de la Junta con meddias para el nivel de alerta 4. En Castilla y León, los centros comerciales han permanecido cerrados durante más del 40% del tiempo en el último año, según asegura ANGED, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución.