La desarticulación, en apariencia, al menos, del núcleo duro de la última versión de la banda del BMW, responsable de más de medio centenar de golpes en la capital y su entorno, solo supuso una breve tregua de los asaltos a negocios con el ... expeditivo método del grupo. Tanto es así que los agentes investigan ahora el intento de asalto a un bar del barrio de El Peral ocurrido más de un mes después de la detención de la presunta cúpula de la banda, en una macrorredada llevada cabo a mediados de septiembre. El golpe cumple punto por punto con el 'modus operandi' de la original banda del mazo y de sus sucesivas versiones ya del BMW. De tratarse de delincuentes procedentes de algunas de sus antecesoras se trataría de la novena versión del grupo.
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«Estuvieron cinco minutos dando porrazos hasta destrozar el cristal de seguridad y sacaron de la cama a los vecinos»
Y todo apunta a ello. El golpe ocurrió en la madrugada del 18 al 19 de octubre en un escenario más que conocido por los delincuentes, como es la calle Alcaparra, una perpendicular al Camino Viejo de Simancas, en el barrio de El Peral. Allí la banda perpetró dos alunizajes contra una farmacia, situada en la esquina con la plaza de la Palmera –blindada ahora contra los alunizajes–, el 5 de febrero de 2020 y, justo un año antes, hizo lo propio en el bar situado a continuación, en dicha plaza. El turno le ha tocado ahora a un segundo negocio de hostelería, el Acero, situado en el número 7 de la calle Alcaparra, ante el que cuatro encapuchados a bordo de un Seat negro (un Ibiza o un León), dos de los modelos fetiches de la banda, se plantaron en aquella madrugada de martes de hace menos de un mes.
«Dos de ellos se bajaron con mazas y la emprendieron a porrazos contra la luna de seguridad (doble y con una cámara interior) mientras los otros dos esperaban en el Seat negro», recuerda el propietario antes de añadir que no les importó que saltara la alarma y que el local contara con cámaras de seguridad.
Más sobre la banda del BMW
Pero fueron los golpes dados, «muchísimos», hasta que reventaron el cristal los que «sacaron de la cama a los vecinos» de los pisos de arriba, que se asomaron, alertaron a los servicios de emergencia y provocaron su huida. La escena replica punto por punto los golpes dados por las ocho versiones anteriores, todas ellas desarticuladas entre 2006 y 2021), de las bandas del mazo y el BMW.
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