Comercio exterior

Qué importa Valladolid: de vehículos y maquinaria a peletería y barcos

La información la aporta el Servicio de Sistemas de Información Estadística de la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta, que ha hecho una explotación detallada de los 96 grupos de productos con código TARIC. Mediante este sistema de clasificación arancelaria, común a todos los países de la Unión Europea, se garantiza la homogeneidad de los datos sobre comercio internacional.

El análisis de esas cifras revela que el siguiente epígrafe en importancia es el caucho y sus derivados, aunque a mucha más distancia puesto que el importe de este tipo de adquisiciones asciende a 380,8 millones de euros, el 4,8%. La clasificación continúa, por cuantía, con los instrumentos de óptica, fotografía, medida, medicoquirúrgicos, de relojería y musicales (231,7 millones, el 2,9%); el mobiliario y las luminarias (145,4 millones de euros, el 1,8%); el plástico y sus manufacturas (138 millones, el 1,7%), y los objetos de fundición, de hierro o acero (115,7 millones de euros, el 1,5%).

Si se coge la tabla por su parte baja, lo que menos traemos del extranjero son paraguas, sombrillas, quitasoles y bastones, 24.200 euros en estos productos el año pasado; fibras textiles vegetales e hilados, por valor de 15.500; peletería y otras confecciones de este tipo, 10.000 euros en el mismo periodo; barcos «y demás artefactos flotantes», 1.700 euros, y pieles y cueros, con únicamente 800 euros.

La estadística sobre las importaciones pone de manifiesto que la Unión Europea es el principal mercado al que acuden las empresas vallisoletanas. Al territorio comunitario pertenecen los cinco primeros países de la lista, con Francia en cabeza y un peso del 31% (2.455,5 millones de euros). Le siguen Alemania (con 691,9 millones, el 8,7%), Italia (630,5 millones de euros, el 7,9%), Rumanía (596,8 millones, el 7,5%) y Portugal (583,6 millones de euros, el 7,4%). El sexto es Marruecos, de donde llegan sobre todo aparatos, material eléctrico y de transporte, y a continuación figuran Polonia, China, Turquía y la República Checa. La otra cara de la moneda, esto es, de donde menos productos se importan, son la parte neendarlesa de San Martín, Santa Elena, Yemen y en último lugar Zimbabue.

La comparación con lo que ocurría hace una década, por otro lado, no depara grandes sorpresas. Tanto es así que, al igual que ahora, los productos más demandados por el tejido empresarial de Valladolid eran los automóviles y sus piezas en todas sus versiones (y en mayor medida, porque suponían 4.204,3 millones de euros), seguidos de la maquinaria (858,6 millones) y el caucho (292,7 millones de euros). En cuanto a los estados de los que éramos clientes, de nuevo lideraba el ranking Francia, seguido de Alemania, Italia, Portugal, la República Checa y Marruecos.