Entrada del Hotel Felipe IV, en la calle Gamazo. Rodrigo Ucero

Valladolid

El Hotel Felipe IV cierra en enero para ser reformado tras su compra por Barceló

La renovación del establecimiento de Gamazo se suma a las obras del Eurostars, el proyecto del Roma y al alojamiento de 55 estudios que se está habilitando en Parquesol

J. Asua

Valladolid

Viernes, 8 de noviembre 2024, 06:40

El Hotel Felipe IV, situado en el número 16 de la calle Gamazo, afrontará a partir del próximo mes de enero una profunda renovación de sus instalaciones para modernizar el alojamiento después de que la cadena Barceló se hiciera con las riendas de este negocio ... hace un año. Las obras obligarán a cerrar el establecimiento al menos durante doce meses para acometer la reforma. La intención es reabrirlo a lo largo de 2026, aunque no se aporta una fecha concreta. La web de la compañía solo admite reservas hasta el próximo 31 de diciembre. Después, ya no ofrece disponibilidad de habitaciones.

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Fue en diciembre de 2023 cuando la cadena comunicaba de forma oficial su desembarco en Valladolid con la adquisición del «emblemático» alojamiento estrenado en 1958 y anunciaba su intención de convertirlo «en uno de los mejores ciudad». El hotel, de cuatro estrellas, cuenta ahora con 131 habitaciones y ocho salones para la celebración de diferentes eventos, así como una zona de cafetería y el área de restaurante.

De momento, no ha trascendido si las obras que impulsará Barceló, que en la comunidad cuenta con otros dos alojamientos en León, cambiarán la distribución interior del céntrico edificio de ocho plantas en cuanto al número de estancias para acoger huéspedes, ni si habrá modificaciones en su fachada o en la zona reservada para salones de reuniones y el área hostelera. Cuando anunció su compra, la empresa destacó del alojamiento su ubicación «junto a los principales monumentos de interés y a solo 200 metros de la estación de tren AVE», lo que le convierte en un lugar ideal tanto para acoger turistas como a trabajadores que se desplazan a Valladolid.

La renovación del Felipe IV se suma a otros proyectos hoteleros ya en marcha en la ciudad. Sin duda, uno de los más relevantes es el que se desarrolla en el antiguo edificio de El Corte Inglés de la calle Constitución, sobre la gran tienda de Zara. Allí la cadena Eurostars afronta la recta final de la obra para estrenar el próximo verano un alojamiento de cinco estrellas con 75 habitaciones. El establecimiento ocupará de la tercera a la sexta planta del inmueble, incluida la azotea, y ofrecerá una zona de spa, gimnasio para los clientes, un área de 'coworking' (espacio de trabajo), vinoteca privada y el área de restaurante. En la cubierta del edificio, se habilitará una piscina y una zona de solarium.

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Muy cerca, en la calle Héroes de Alcántara, junto al Atrio de Santiago, la familia Lasa ultima el proyecto para remodelar el veterano Hotel Roma. Pendiente aún de varios aspectos de su tramitación, el plan pasa por la demolición del actual inmueble, una licencia que el Ayuntamiento concedió el pasado mes de enero, para levantar un edificio totalmente nuevo con una superficie de 3.400 metros cuadrados repartidos en siete plantas, dos de ellas bajo rasante, y con capacidad para entre 47 y 49 habitaciones, además de otros servicios para los clientes, entre los que se incluye una cafetería y restaurante.

No solo en la zona centro el sector hotelero está en plena expansión o renovación. En el barrio de Parquesol, la empresa Polotel ya ha ejecutado el 70% de las obras de transformación de la antigua sede de la empresa Madison, en la calle Juan García Hortelano, para abrir un alojamiento hotelero con 55 estudios. Se trata de estancias con unas superficies que oscilan entre los 25 y los 30 metros cuadrados, distribuidas entre la zona de descanso, un cuarto de baño y una pequeña cocina, con nevera, microondas, armarios para el menaje y una vitrocerámica portátil. La idea de sus promotores es abrirlo el próximo mes de marzo.

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A estos proyectos se suma el promovido por el cantante y hostelero Jaime Valentín para la finca La Pava, situada en el número 118 de la avenida de Santander, donde tiene previsto crear un espacio para la celebración de eventos y conciertos al aire libre y que incluye un alojamiento en la casa de 600 metros cuadrados con la que cuenta el espacio. Tendrá siete suites, además de zona de cafetería, salones y un gimnasio. La inversión entre la compra del terreno y su adecuación interior ronda el millón de euros y la previsión, cuando esté a pleno rendimiento, es que dé trabajo a unos treinta empleados.

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