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«Somos uno de los grandes perjudicados, con unas medidas que restringen aún más nuestras posibilidades de negocio; lamentablemente así no se puede trabajar, parece una persecución continuada al sector». Así justificaba la presidenta de la Asociación Provincial de Empresarios de la Hostelería de Valladolid ( ... Apehva), María José Hernández, la presencia de los cerca de 300 propietarios, empleados y clientes de la hostelería vallisoletana que este sábado por la tarde se concentraron en la Plaza Mayor contra las nuevas medidas adoptadas por la Junta de Castilla y León (reducción de aforos al 50% y bares de copas y ocio nocturno con atención únicamente en terrazas al aire libre, principalmente), además de para reivindicar que les «escuchen».
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La iniciativa, organizada por Apehva, contó además con el respaldo de varios miembros de Más que Bares, organización que aglutina a cerca de 70 empresarios de bares de copas. Así, al filo de las siete de la tarde, los asistentes –algunos ataviados con ropa negra en señal de luto; otros, con sogas colgando del cuello– se movilizaron en el corazón de la ciudad con pancartas en las que se podía leer «No somos el problema, quizás la solución», «Soy empresario y busco trabajo» o «Botellones y fiestas no son ocio nocturno», entre otros mensajes.
Coronavirus y hostelería
Porque, reconoció Hernández, encargada de leer el manifiesto a los pies del ayuntamiento, las normas adoptadas por el Ejecutivo regional complican «mucho» el desarrollo de su actividad. «Nuestras economías están muy resentidas y el sector, muy dañado», lamentó la representante provincial, al tiempo que incidió en que «no se puede seguir pensando que la hostelería o el ocio nocturno son las vías de contagio del coronavirus».
Por todo ello, los hosteleros, a través de su presidenta, reclamaron a la administración «que nos escuche porque no podemos elegir entre la salud y la economía», así como una serie de iniciativas que, a su juicio, contribuirían a mantener el sector a flote. Como, por ejemplo, prorrogar los ERTE hasta final de año, ampliar las prestaciones por cese de actividad para autónomos, la exención en el pago del alquiler y la reducción «temporal» del IVA hasta el 50%, además de «diálogo y ayudas económicas directas para un sector» del que, anticiparon, entre 15.000 y 20.000 empleos «corren gravísimo peligro».
Quien también estuvo presente en una concentración que tildó de «interesantísima» fue el presidente de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León, Ángel Blasco, quien insistió en que «no queremos romper el diálogo con la Junta, solo que nos escuchen mucho más que hasta ahora». Asimismo, el dirigente regional señaló hacia la hostelería como uno de los «actores más perjudicados» por la pandemia, por lo que, del mismo modo que Hernández, reclamó ayudas para los empresarios.
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