La Federación Antonio Machado homenajea a Jesús Anta en la X edición de sus premios vecinales

Un acto que estaba previsto celebrar el pasado 31 de enero, pero que debido al fallecimiento de Jesús la federación decidió aplazarlo.

«El agua me une a Jesús porque él, gracias al río, me unió a mis vecinos», detallaba una emocionada María de la Concha. Y es que del 'divulgador de Valladolid' partió la idea de 'La Esgueva' «cuando nos juntó a los ocho barrios por los que baña este río de la ciudad». De la Concha explicaba que «Jesús era mucho más que un político» y por eso lo quiso recordar como «la serenidad en los momentos de tempestades, era una persona multifunción, hacía papeleo, traía la cultura y siempre trabajaba por ayudar a los barrios».

«Jesús era como un esconjuradero, porque controlaba las negras tormentas», explicaba María José Larena Gorostiaga, expresidenta de esta Federación. Y es que Anta para sus vecinos era mucho más que un divulgador de su ciudad. Era «la personificación del activismo vecinal».

Un político y divulgador autodidacta que durante toda su vida estuvo 'callejeando' por Valladolid empapándose de todos los detalles de la ciudad hasta tener un conocimiento casi quirúrgico de cada rincón vallisoletano.

Si algo destacó de él es que se metió hasta la médula en el movimiento vecinal. En los barrios. Lo hizo en La Rondilla y en Belén. Zonas 'obreras' donde vivió hasta sus últimos días.

El centro cívico Bailarín Vicente Escudero ha sido el escenario que ha acogido la décima edición de premios vecinales donde se galardona a tres vallisoletanos por diferentes motivos, y no todos buenos: «Esperpento ciudadano», «Defensa de los valores de la ciudadanía» y «Entidad Solidaria».

La gala celebrada esta tarde desde las 19:00 horas, conducida por la periodista Franca Velasco y amenizada por la música local de Rocío Torió, las asociaciones de Valladolid han entregado los tres galardones.

El 'alcalde B' de la ciudad –en referencia a Indalecio Escudero, al frente de la controvertida Coordinación de Políticas Públicas– tuvo el 'honor' de ser distinguido con el título de 'Esperpento ciudadano'. Un premio en el que las asociaciones aprovecharon para pedir a las administraciones que pasen por los barrios y observen lo que los ciudadanos necesitan. También bromearon con la «ilusión» que les hacía «entregar el premio que más dinero cuesta a pesar de no conocer y no haber visto nunca a su galardonado».

María José Larena Gorostiaga, ha sido galardonada con el premio «Defensa de los valores de la ciudadanía». «Un reconocimiento a sus más de 30 años participando en el movimiento vecinal».

Larena, promotora de estos galardones hace diez años, ha confesado que lo recibe con «más ilusión» que un Nobel, porque es «momento de no rebelarse -rendirse- y florecer a pesar de estar viviendo un momento de caos. Ahora todo parecen barbaries, el destrozo de la Rosaleda, o el fin de los presupuestos participativos, pero no van a poder robarnos la alegría».

El galardón «Entidad solidaria», fue para la Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid. «Por sus 16 años de trayectoria en su incansable denuncia por la ocupación y el apartheid que Israel viene cometiendo desde hace más de 70 años».