Valladolid

La estrategia de la UVA para atraer alumnos gitanos a sus aulas

Para atajar estas cifras, la Universidad de Valladolid ha puesto en marcha unas jornadas que pretenden sensibilizar a la comunidad educativa y atraer a cada vez más alumnos gitanos a la educación superior. Pues según datos del citado informe, l 62,8% no se gradúa en la ESO, frente al 4% de la población general y sólo obtienen título universitario el 0'4% del alumnado de esta minoría étnica.

A través del Área de Responsabilidad Social, la UVA ha organizado sus I Jornadas de Antigitanismo y Universidad, que se inauguraron con gran éxito el pasado 30 de noviembre en la facultad de Educación y Trabajo Social y que este pasado 14 de diciembre celebraron un nuevo encuentro. La importancia de esta iniciativa radica en la necesidad de visibilizar los valores de la cultura gitana desde la destrucción de aquellos estereotipos que están en la base de nuestra sociedad. Con ellas, lo que se pretende es sensibilizar a la comunidad universitaria sobre la presencia de este colectivo en el ámbito académico, especialmente de las mujeres gitanas que, cada vez más, están dando sus primeros pasos en las aulas universitarias.

Con este propósito, se ha inaugurado una exposición impulsada por la Asociación 'Enseñantes con gitanos', que narra la historia y cultura del pueblo gitano a través de paneles expositivos. Entre las conferencias impartidas, la primera de ellas tuvo lugar el día 30 y llevaba por título 'La hija de Antonio quiere ser ministra, una, conquista y soledad', impartida por Trinidad Muñoz Vacas, maestra y antropóloga gitana, y aglutinó a numerosos representantes del colectivo gitano. Este pasado 14 de diciembre se ha celebrado también la conferencia «Investigación participativa con el Pueblo Gitano en la Universidad», a cargo de Pilar Espeso Molinero, profesora del Departamento de Antropología de la Universidad de Alicante. Al ser un proyecto que tendrá continuidad a lo largo del curso, en el segundo cuatrimestre, con fecha aún por determinar, se proyectará en la Facultad de Medicina la película «Carmen y Lola» con un debate posterior con sus protagonistas. «Hemos decidido empezar por la facultad de Educación y Trabajo Social porque es la que más alumnado gitano acoge. Esta iniciativa inclusiva será llevada a todos los campus de la UVa», señala Jesús María Aparicio Gervás, profesor de Educación Intercultural de la Universidad de Valladolid y uno de los organizadores de las jornadas. «Cada vez hay más alumnado gitano en la UVa. Queremos reforzar el conocimiento de la comunidad gitana entre el alumnado no gitano, porque consideramos que sólo a través del conocimiento podremos eliminar prejuicios y estereotipos y ello nos permitirá generar numerosas estrategias de convivencia», apunta Aparicio.

Se desconoce el dato exacto del número de estudiantes gitanos en la UVA, debido a que éstos no se significan en el momento de su matriculación. No obstante, en los últimos años, sí que se ha notado un aumento de su presencia en las aulas de los diferentes campus. «A pesar de este progreso, persisten estereotipos que afectan a la experiencia académica y social de estos jóvenes. El gran desafío persiste en cambiar esas percepciones arraigadas en la sociedad», señala este profesor, quien apunta que los estudiantes gitanos demuestran una resiliencia asombrosa, rompiendo barreras no solo académicas, sino también culturales.

Estas jornadas buscan crear un ambiente inclusivo que no solo beneficie a los estudiantes gitanos, sino que enriquezca la experiencia de aprendizaje de toda la comunidad universitaria. «La Universidad abre sus puertas a todos. A la inauguración de las jornadas acudieron los más altos representantes de la Universidad y también de la comunidad gitana de Valladolid, y eso es algo importantísimo. Estamos tendiendo puentes y buscando una educación inclusiva para que cada vez tengamos más alumnado gitano. Estamos abriendo camino», indica el profesor Aparicio, quien abunda en la implicación y el esfuerzo de los alumnos gitanos a la hora de sacar adelante sus estudios. «Los pocos que llegan a la universidad lo hacen con muchísima ilusión y un esfuerzo brutal por su parte y por la de sus familias. Casi el 100% de ellos consiguen el éxito porque su grado de responsabilidad es enorme», añade.

Desde el Área de Responsabilidad Social de la UVa se ha priorizado este asunto y se ha llevado a cabo un exhaustivo cuestionario a más de 1.000 alumnos de los diferentes grados de Ciencias Sociales, para detectar el grado de antigitanismo en la comunidad universitaria. «Estamos empezando a analizar los datos. De momento, lo que hemos detectado es que no tenemos una población extremadamente prejuiciosa hacia los gitanos, pero sí que hemos visto determinadas conductas que deberíamos trabajar con ellos para eliminar ciertas barreras», indica la profesora Lorena Valdivieso, profesora de Psicología Evolutiva y de la Educación en la UVa.

La Fundación Secretariado Gitano de Valladolid trabaja también en la promoción educativa de la comunidad gitana, a todos los niveles y en todas las edades. La educación es un pilar básico del desarrollo de las personas, y uno de los elementos que favorece la inclusión social y la igualdad de oportunidades. Según el estudio anteriormente mencionado, actualmente existe una evidente situación de inequidad educativa: 6 de cada 10 jóvenes gitanos no han completado con éxito los estudios obligatorios. Para hacer frente a esta situación, la Fundación desarrolla programas en todas las etapas educativas priorizando ante todo las etapas obligatorias. Son los programas Promociona, Promociona-T y Promociona+. «Sólo el 0,4% del alumnado gitano ha completado algún nivel de educación superior, pero el problema viene de mucho más atrás porque el 40% de los niños gitanos han repetido algún curso antes de los 11 años. Hay un problema de implicación de las familias gitanas, pero sobre todo hay un problema del sistema educativo que excluye y dejan que se vayan las familias gitanas desde los 11 años», explica Alberto González, Orientador Educativo del Programa Promociona+ financiado por La Caixa, de la Fundación. Su labor es apoyar a los alumnos gitanos para que logren el éxito escolar en la ESO y continúen estudiando.

«Queda mucho trabajo por delante para que el sistema educativo se adapte a la comunidad gitana. Es importante acompañar a los niños y jóvenes para que ellos se sientan más seguros. Nuestro objetivo es llenar las aulas de gitanos en los estudios postobligatorios. Otra gran barrera que hay que solucionar es el aspecto socioeconómico, no olvidemos que gran parte de la sociedad gitana está en riesgo de exclusión. De lo que se trata es de poner al niño o al joven, en el centro de todo, porque actualmente muchos se ven abandonados y perdidos en la escuela y ahí tenemos gran parte de culpa la sociedad», concluye González.