Valladolid desaparecido
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El sanatorio del doctor QuemadaJosé Quemada Blanco (Valladolid, 1898) adquirió a principios de los años cuarenta del siglo XX una finca en la calle Aurora esquina con el Paseo de Zorrilla en la que existía una pequeña edificación. Tras realizar las adaptaciones necesarias para poder utilizarla como centro de ... atención sanitaria, abrió en ella, en 1943, un sanatorio quirúrgico con 24 habitaciones individuales. La puerta de entrada estaba enmarcada por una verja de hierro forjado apoyada en un zócalo de piedras sillares y dos columnas sobre las que reposaban sendos leones de piedra.
Especialista en Aparato Digestivo y Cirugía, Quemada abandonó su plaza de profesor ayudante de la Cátedra de Cirugía de la UVA para dedicarse a su especialidad de forma privada. Corría el año 1925 cuando fijó su consultorio en su domicilio de la calle Duque de la Victoria, en los años treinta fue jefe de la sala tercera de Cirugía del Hospital Militar y en los cuarenta abrió su propia clínica a la que bautizó como Sanatorio quirúrgico San José.
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El edificio ocupaba la parte noroeste de la finca de 12 hectáreas, ubicada en el número 83 del Paseo de Zorrilla. La casa tenía dos plantas. En el vestíbulo de entrada se encontraba la recepción, la centralita de teléfonos y dos pequeñas salas de espera. Laboratorio de análisis clínicos, farmacia, almacenes, comedor, cocinas, aseos, sala de estar, sala de curas, de rayos X, quirófanos... En el patio anterior al sanatorio había un jardín central con una fuente circular. Al fondo, la capilla, inaugurada en 1947. La atención de enfermos y servicios la llevaban las monjas franciscanas Misioneras de la Divina Pastora.
La entrada estaba protegida por un porche acristalado, que hacía de base de una gran terraza a la que tenían salida algunas de las habitaciones del piso superior. Frente a ella, en el vestíbulo, el doctor Quemada mandó instalar un ascensor para camillas, en el centro de la amplia escalera que comunicaba los dos pisos. En el rellano, una imagen del Sagrado Corazón de Jesús. «La puerta que cerraba el pasillo comunicaba con clausura, las celdas de las monjas, las cocinas, la capilla y una salida al patio posterior donde había una galería con enredaderas para uso de las religiosas, una huerta y salida a la calle de la Aurora para la entrada de suministros», recuerda José de Castro Lorenzo en su libro 'El Sanatorio del Dr. Quemada. Orígenes de la cirugía digestiva en Valladolid (1943-1981)', publicado en 2019 por el Ayuntamiento de Valladolid.
Los últimos años de vida del sanatorio los vivió reconvertido en Casa de Socorro Municipal. En 1981 cerró definitivamente sus puertas. En 1985 la verja que rodeaba al entonces ya desaparecido hospital se instaló en la actual plaza del Doctor Quemada. No se colocaron los leones. Sobre el solar que dejó el sanatorio se levantó un gran edificio de viviendas.
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