Valladolid desaparecido
La casa de la capellanía del obispo La GascaSecciones
Servicios
Destacamos
Valladolid desaparecido
La casa de la capellanía del obispo La GascaSituada en el solar sobre el que hoy se levanta el actual inmueble del número 3 de la calle Colón, se comenzó a edificar a principios del siglo XVII la conocida como casa de la capellanía del obispo La Gasca. El abulense Pedro de la ... Gasca (Navarregadilla de Ávila, 1493), clérigo, magistrado, político, 'pacificador' del Perú y obispo de Palencia y de Sigüenza, mandó edificar una casa para que vivieran en ella los capellanes de la Iglesia de La Magdalena -obra realizada también por encargo de este obispo- encomendados de cuidar su memoria. De La Gasca dejó estipulado en su testamento, fechado en 1567, la construcción de un edificio para tal fin. No fue hasta 1602 cuando sus herederos entregaron al capellán mayor del templo vallisoletano unas casas que tenía frente a la iglesia, en la llamada calle Ancha de la Magdalena. Lo que hoy es la calle Colón eran entonces dos calles paralelas, la Ancha y la Angosta, tal y como figura en el plano de Ventura Seco de 1738.
Noticias relacionadas
Sonia Quintana
Sonia Quintana
Fue Ana de la Vega Barros y Matanza, esposa de Diego Gasca y Ávila, hermano de Pedro, quien hizo entrega en 1602 al capellán mayor de la iglesia de La Magdalena de «dos casas pequeñas que yo tengo en la calle principal como se va desde mis casas principales vía recta a la dicha iglesia de la Magdalena», además de otra casa vieja que confrontaba con dicha iglesia y compró a la ciudad «un pedazo de ronda que está junto al Prado de la Magdalena» para ampliación del solar resultante una vez derribados todos estos edificios. La casa, con zócalo de piedra, disponía de sótano, piso bajo y principal. La portada -única parte que hoy se conserva del primitivo inmueble- estaba realizada en piedra con arco de medio punto y el escudo de la familia La Gasca a cada lado de la puerta; sobre ella un pequeño balcón. En el lateral de la avenida de Ramón y Cajal había otra entrada más pequeña, también en piedra, con óculo sobre la puerta. La traza fue realizada en 1606 por Diego de Praves, autor entre otras de la fachada de la Iglesia de la Vera Cruz; la cantería y los escudos de la fachada les fueron encargados a los maestros de cantería Juan de la Lastra y Pedro de la Vega. La rejería salió del taller de Juan del Barco. La construcción de la casa finalizó hacia 1616.
La vivienda continuó manteniendo la función para la que fue construida hasta poco antes de 1859, año en que Manuel Gutiérrez de la Concha y Francisca de Paula Tovar, marqueses del Duero y Revilla y condes de Cancelada, vecinos de Madrid, permutaron varias fincas, ésta entre ellas -«una casa denominada de los Capellanes en el casco de esta ciudad, frente de la iglesia de la Magdalena en la calle del mismo nombre número 1 antiguo y 8 moderno»- con Juan y Cipriano Solórzano, recibiendo a cambio una finca llamada «de España en las afueras de Madrid», a continuación de la Puerta de Recoletos. El inmueble estaba entonces siendo utilizado como cuartel de la Guardia Civil.
Cuando dejó de ser cuartel de la Guardia Civil tuvo diferentes inquilinos hasta finales de los años setenta, momento en que, ya en muy mal estado, fue derribada para construir en su solar el actual edificio, para el que se reutilizó la parte inferior de la antigua fachada de piedra, conservando también el escudo partido de la familia La Gasca, rematado por capelo episcopal y orlado de ocho banderas, propio de la familia La Gasca y Ávila en el lado de la izquierda y por las armas de Ana de la Vega Barros y Matanza, en el escudo partido del lado derecho que aparece rematado con yelmo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.