La defensa del exconcejal García de Coca le define como «chivo expiatorio» del 'caso PGOU' de Valladolid

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En la decimosegunda jornada del juicio, el abogado de García de Coca puso de manifiesto la persecución política que supone el presente proceso judicial, visto para sentencia dieciséis años después de que se produjeran los hechos, y, al igual que luego harían las defensas de los también encausados Luis Álvarez Aller, arquitecto municipal, y el exjefe del Área de Urbanismo, Modesto Mezquita, pidió a la Sala un fallo absolutorio con todos los pronunciamientos.

En su alegato, la defensa del exedil incidió en que todas las imputaciones de la fiscal del caso y de la acusación popular, ejercida por la Federación de Vecinos 'Antonio Machado', se basan en meras conjeturas, sospechas e hipótesis que no han servido para desvirtuar su derecho a la presunción de inocencia y sin que en momento alguno hayan podido insinuar interés del acusado en las modificaciones detectadas en el PGOU ni vinculación con los promotores supuestamente beneficiados. «Es un chivo expiatorio de unos hechos en los que, de haberse producido como dicen las acusaciones, mi cliente ni participó ni obtuvo beneficio», señaló el defensor, informa Europa Press.