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Centros públicos y concertados de Valladolid están prácticamente a la par en la solicitud de cursos sobre diversidad sexual, igualdad o contra la violencia de género, unos talleres que Vox quiere que el Ayuntamiento paralice al considerar que conllevan un adoctrinamiento de los menores.
Según los datos ofrecidos este mismo jueves en el Consejo Municipal de Educación, el de 'Tolerancia y diversidad sexual' ha sido impartido en siete colegios públicos y seis concertados. En el caso del titulado 'Yo me sumo a la igualdad', han sido nueve los centros concertados que lo solicitaron frente a los seis públicos. También ha interesado a los equipos docentes el que aborda la violencia de género, con 13 públicos y 12 concertados. Únicamente el de educación afectivo-sexual ha tenido menos éxito en los centros gestionados por órdenes religiosas, con dos solicitudes frente a las ocho de colegios públicos. 'Amor no es posesión' se ha desarrollado en 12 públicos y ocho concertado. El número total de alumnos que han asistido a estas actividades asciende a 3.716 chicos y chicas.
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La presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Centros Públicos de Valladolid, María Capellán, aclara que para acudir a esos talleres, como para el resto de actividades que se desarrollan fuera de las instalaciones escolares, el centro solicita autorización a los progenitores. Es decir, las familias saben qué contenidos se van a abordar en esas charlas. «El que quiera lo autoriza y el que no, no», destaca. A su juicio, es necesario que los niños y las niñas conozcan todas las opciones. «Personalmente, considero que adoctrinar es cuando solo ofreces una y las demás no existen», destaca Capellán.
La máxima responsable de estas asociaciones a nivel regional, Soledad Alegre, también se mostró totalmente contraria a la postura de Vox de eliminar esta oferta complementaria a la educación reglada. «Nuestros hijos e hijas son diversos y creemos que es necesario este tipo de formación para que se desarrollen como personas», argumentó.
La concejala de Educación destaca que «todas las actividades se aprueban en el Plan de centros y lo autoriza el consejo escolar, donde están representadas las familias de los alumnos».
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