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Bertín Osborne firma un autógrafo a una niña durante la inauguración de Parque Alameda en 1997. Gabriel Villamil
El hilo.

El barrio de Valladolid que inauguró Bertín Osborne

El conocido artista, que dio sus primeros pasos como cantante en una cafetería del Paseo de Zorrilla, acompañó a Javier León de la Riva en la puesta de largo del último gran proyecto de Tomás Rodríguez Bolaños: Parque Alameda

Berta Muñoz Castro

Valladolid

Sábado, 22 de junio 2024, 08:18

Javier León de la Riva fue el encargado de inaugurar el gran proyecto de la última etapa de Tomás Rodríguez Bolaños, un ambicioso plan urbanístico que se hizo realidad en junio de 1997 en la zona sur de la ciudad. Dos globos con forma de zepelín amarrados a las Puertas de Valladolid, obra de Cristóbal Gabarrón, y un espectáculo de imitadores –los finalistas del programa 'Lluvia de estrellas', con Bertín Osborne a la cabeza– daban la bienvenida a Parque Alameda, un nuevo barrio que se presentaba como el distrito «con mayor índice de vivienda protegida» de la capital del Pisuerga. Abro hilo:

↓ El viernes 13 de junio de 1997 se presentaba en sociedad Parque Alameda, el primer barrio de promoción municipal de la ciudad que ponía a disposición de «parejas recién casadas» más de dos mil viviendas repartidas en 24 calles entre la carretera Rueda y el Paseo Zorrilla. El Ayuntamiento de Valladolid había invertido 9 millones de euros en la urbanización de esta zona al sur de la ciudad que ofrecía pisos amplios y de buenas calidades a 72.000 euros, los más caros, y chalés a 108.000.

El alcalde de Valladolid Tomás Rodríguez Bolaños en la presentación del proyecto urbanístico Parque Alameda a principios de los noventa. Amva

↓ La gestación de Parque Alameda se había iniciado en 1982, pero la primera piedra no se colocó hasta de julio de 1994. Desde mediados de los años ochenta los barrios hasta entonces más populares de Valladolid, como Las Delicias y La Rondilla, que habían acogido a la población obrera, iniciaron su declive demográfico. Los nuevos moradores buscaban pisos más económicos – en 1997, la vivienda nueva en Valladolid había subido el 4,7% y el precio del metro cuadrado se situaba en 140.000 pesetas (841 euros)– que encontraron en el alfoz y en la zona oeste y sur de la ciudad. Parque Alameda, con el 85% de sus viviendas incluidas en un régimen de protección oficial, se convirtió en los años noventa en una opción muy atractiva que ofrecía pisos modernos y chalés unifamiliares a precios por debajo del mercado.

Solares y viviendas en construcción en Parque Alameda en 1997. A la derecha de la imagen principal, la vía del ferrocarril y el polígono de Argales. Debajo, edificios del barrio en obras.
Imagen principal - Solares y viviendas en construcción en Parque Alameda en 1997. A la derecha de la imagen principal, la vía del ferrocarril y el polígono de Argales. Debajo, edificios del barrio en obras.
Imagen secundaria 1 - Solares y viviendas en construcción en Parque Alameda en 1997. A la derecha de la imagen principal, la vía del ferrocarril y el polígono de Argales. Debajo, edificios del barrio en obras.
Imagen secundaria 2 - Solares y viviendas en construcción en Parque Alameda en 1997. A la derecha de la imagen principal, la vía del ferrocarril y el polígono de Argales. Debajo, edificios del barrio en obras.

↓ Este nuevo barrio compuesto por una veintena de calles con nombre de denominaciones de origen y parajes naturales de Castilla y León como Somosierra, Macizo de Gredos, Sanabria o Guadarrama, se convirtió en el primer gran logro de la Sociedad Municipal de Suelo y Vivienda (VIVA), una entidad creada por el Ayuntamiento en 1993 para gestionar el suelo urbano de la ciudad y abaratar el precio de la vivienda a las orillas del Pisuerga. No obstante, la empresa municipal que supuso el impulso definitivo del Plan Parque Alameda suscitó numerosas protestas en el sector local de la construcción porque ofrecía pisos dos y tres millones de pesetas (12.000-18.000 euros) más baratos que los de las promociones del resto de la ciudad. Pero volvamos a la celebración.

Javier León de la Riva y Juan José Lucas brindan con champán el día de la inauguración. Amva

↓ La fiesta comenzó a las ocho de la tarde en una rotonda, en la glorieta donde confluyen el Paseo de Zorrilla y la Carretera de Rueda. Allí, ante la mirada atenta de varios miles de personas, dos globos con forma de zepelín levantaron las fundas que escondían la escultura Puertas de Valladolid en un acto presidido por el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva, el presidente de la Junta, Juan José Lucas, y el autor de la obra, Cristóbal Gabarrón. El escultor más internacional de la ciudad quiso plasmar en los dos obeliscos coloridos y vanguardistas de diez metros de altura objetos y acontecimientos de la historia de Valladolid como el tren burra, el Arco de Ladrillo o la Barca del Catarro. Era la primera de las dos obras de arte que se inaugurarían ese día en Parque Alameda.

Los dos obeliscos del monumento Puertas de Valladolid. Archivo Municipal de Valladolid

↓ Había mucha expectación en Valladolid por ver cómo se desarrollaba la inauguración de un barrio que llevaba más de una década gestándose y que supuso la condición sine qua non de Izquierda Unida para apoyar la investidura del último mandato de Tomás Rodríguez Bolaños (1991-1995). La nueva urbanización, con una extensión aproximada de cien campos de fútbol, ponía a disposición de las parejas jóvenes 2.060 pisos y chalés repartidos en una veintena de calles, cinco plazas y un gran parque de nada menos que 25.000 metros cuadrados. Si dos zepelines habían descubierto los obeliscos de Gabarrón, 5.000 globos verdes amarillos y rojos –los colores de Parque Alameda– se lanzaron a aire para inaugurar el grupo escultórico 'Saltos', un homenaje en bronce a los juegos tradicionales de Gonzalo Coello que desde ese día descansa en el parque público del barrio.

Juan José Lucas, Javier León de la Riva y Gonzalo Coello, junto a la escultura 'Saltos', que recuerda el juego de la pídola o burro. Amva

↓ Pero el plato fuerte del día fue, sin duda, la presencia de Bertín Osborne. Cerca de las diez de la noche, justo después de los discursos del presidente de la Junta y del alcalde de Valladolid, los finalistas del famoso programa de Antena 3 'Lluvia de estrellas' y su espontáneo presentador, enfundado en elegante un frac negro, deleitaron a los vallisoletanos con un concierto donde sonaron temas de Julio Iglesias, Rosario, Marta Sánchez, Elton John, Celia Cruz, Joan Manuel Serrat y Ana Belén. Centenares de personas se agolparon junto al escenario instalado en la confluencia del Paseo de Zorrilla con la calle Vinos de la Ribera del Duero. Los responsables de la fiesta, conscientes del tirón que iba a tener la presencia del artista en la ciudad, colocaron casetas con refrescos y bocadillos, urinarios portátiles y una pantalla gigante sobre la tarima.

Javier León de la Riva entrega una medalla a Bertín Osborne en Parque Alameda. Amva

↓ Bertín Osborne, además de ser una estrella mediática, tenía una relación muy especial con la ciudad de Valladolid. El cantante había vivido dos años en la calle García Morato, mientras estudiaba Agrónomos en INEA, en el Camino Viejo de Simancas. Además, esta fue la ciudad donde descubrió su vocación. «Yo empecé a cantar en Valladolid, cuando no era un profesional», recordó en una entrevista a El Norte. «En el Paseo de Zorrilla había una cafetería que se llamaba Noche y Día y allí, en el sótano, había una especie de escenario donde iba a cantar gente a la que le apetecía. Esos fueron los primeros pasos míos como futuro cantante y resultó muy divertido». Esto ocurría en torno al año 1978, tres años antes de que grabara su primer disco, 'Amor mediterráneo'. No obstante, su éxito internacional se consolidó al ganar el premio a la mejor voz en el Festival de San Remo en 1983. En las cuatro décadas largas transcurridas desde entonces, Bertín Osborne ha registrado una treintena de álbumes.

Un jovencísimo Bertín Osborne, en su época de estudiante en INEA. El Norte

↓ La elección del cantante para la puesta de largo de Parque Alameda fue una decisión unánime, asegura Javier León de la Riva al otro lado de la línea telefónica. «Durante los 24 años que he estado en el Ayuntamiento de Valladolid –veinte en la Alcaldía y cuatro en la oposición– tenía la buena costumbre de reunirme con mi equipo todos los días a las nueve de la mañana. Recuerdo que en una de esas reuniones se pusieron sobre la mesa varios nombres y todos consensuamos que fuera Bertín Osborne el encargado de inaugurar este gran proyecto». «Han pasado casi treinta años de aquello, pero creo recordar que la fiesta fue financiada por patrocinios externos al Ayuntamiento», explica el exalcalde popular. «Fue una buena tarde», resume De la Riva, que no se olvida del punto reivindicativo de la jornada protagonizado por los miembros de la Asociación de Vecinos de Parque Alameda. Pancartas en mano, un centenar de vecinos aprovecharon la presencia institucional para reivindicar la construcción de un centro educativo en el barrio donde escolarizar a los hijos de las 700 familias que estaban a punto de llegar al distrito.

León de la Riva se dirige a los cientos de vallisoletanos presentes. R. Gómez

↓ «Bertín era un hombre muy cercano, tenía gran capacidad de convocatoria y además era muy amigo del diestro vallisoletano Roberto Domínguez. En esa época presentaba 'Lluvia de estrellas' y no llenaba titulares por los temas de ahora», desliza Javier León De la Riva con ironía, un par de días después de que el cantante haya acaparado todas las miradas por reconocer la paternidad del hijo de Gabriela Guillén (37 años) después de meses negando la mayor. No hay semana que la prensa rosa no escudriñe alguna faceta de la vida íntima del artista. Porque Bertín, que está a punto de cumplir los 70 años, siempre es noticia. En lo personal, por sus devaneos amorosos, y en lo profesional, porque no para. El presentador de 'Mi casa es la tuya' –con más de 150 programas emitidos– está repasando sus cuatro décadas en el mundo de la música por escenarios de toda España y presentando su último disco, 'Ranchero'. '40 años son pocos' es el título de la gira.

¿Sabías que Bertín Osborne había inaugurado Parque Alameda?

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El 18 de abril de 1953 salió de la cadena de montaje de FASA, en el Paseo del Arco de Ladrillo, el Renault 4CV, el primer vehículo fabricado íntegramente en España. El coche fue declarado Bien de Interés Cultural y se puede ver totalmente restaurado en un museo de Valladolid.

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