Valladolid

El Ayuntamiento saca a concesión el bar del Pinar y ultima el de la Pérgola

El inmueble tiene una superficie total construida de 136 metros cuadrados, distribuida en dos edificaciones de una planta destinadas a bar y almacén respectivamente y cuenta con una superficie de suelo de 645. El bloque principal se destina al espacio hostelero y está dotado de una sala con mesas y sillas, barra, cocina y aseos. La otra edificación es un almacén-bodega y cuenta con una superficie construida de 37,50.

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El Ayuntamiento destaca que este espacio «se sitúa en un entorno privilegiado, zona de esparcimiento y recreo, y es voluntad que su utilización contribuya a animar el paseo y la estancia de la ciudadanía en el Pinar de Antequera». Desde 2002, el que se denominaba bar Antequera ha estado gestionado por la hostelera Yoana Prieto, que en su despedida ya anunció que podría concurrir a esta licitación. No obstante, la empresaria tiene previsto abrir a finales de este mes otro establecimiento en la misma zona. Se llama La Malaquita y se ubica en el espacio del antiguo lavadero, a escasos metros del espacio municipal que ahora sale a concesión.

Además de este bar, la Concejalía de Urbanismo ya cuenta con un borrador del pliego para sacar a licitación el bar de la Pérgola del Campo Grande -cerrado desde hace dos años- con el objetivo de publicarlo antes del verano. El edil responsable del área, Ignacio Zarandona, ha asegurado hoy que durante el proceso de 'expresión de interés' abierto durante un mes para que los hosteleros que quieran optar a él expusiesen los criterios y el precio han sido varios los empresarios interesados en su explotación.

Zarandona es «optimista» y espera que pueda reabrirse esta temporada, aunque «dependerá del ritmo de implementación del proyecto que resulte elegido», según matiza. El concejal avanza que entre las ideas que se han presentado en ese primer proceso de tanteo hay algunas «con una oferta gastronómica y lúdica atractiva». Respecto al precio anual del canon para su explotación, el edil acota que no se va a fijar ninguna cantidad de salida, de tal modo que serán los hosteleros que opten a él los que harán sus ofertas. Quien se quede con este espacio deberá amueblarlo por completo para dar el servicio, ya que el último adjudicatario se llevó cámaras, vajilla y el resto de elementos al ser de su propiedad.

Cabe recordar, que el canon que se ha pedido en las tres licitaciones fallidas desde la clausura del bar de la Pérgola ha ido bajando en cada convocatoria. Comenzó con 33.750 euros anuales en 2022, se rebajó a 22.500 un año más tarde y el pasado ejercicio se quedó en 20.160.