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El Ayuntamiento de Valladolid «extremará más si cabe» las medidas de seguridad durante las obras de rehabilitación del teatro Lope de Vega tras el incendio que se ha registrado esta pasada madrugada. El concejal de Urbanismo, Ignacio Zarandona, ha reconocido que de momento no ... hay ninguna pista sobre el origen del fuego y cree que será difícil determinar las causas. Según ha explicado el edil, quien confirma que la obsoleta instalación eléctrica original del inmueble estaba cancelada desde que arrancó el tajo, a las cuatro de la tarde del martes se abandonaron los trabajos en el edificio y se dejó de operar con maquinaria para posteriormente humedecer con agua la zona de la viguería de madera en la que se había actuado.
El fuego, según ha concretado, ha afectado a un entablado de un pavimento de las zonas de los deambulatorios que rodean la caja escénica, el muro de herradura. Esos pasillos, cuya la altura libre apenas llega a los dos metros veinte, tenían que ser demolidos para adaptarlos a las condiciones que requiere hoy un espacio público de estas características. Es decir, que la joya del teatro, su sala escénica del XIX, no ha resultado dañada gracias a la rápida y efectiva intervención de los Bomberos.
No fue hasta las prácticamente tres de la mañana cuando se desató un pequeño olor a humo que hizo saltar las alarmas. «Realmente es sorprendente, se estaban llevando todas las medidas de seguridad, esta mañana ha habido una reunión con el arquitecto, autor del proyecto y director de la obra, con todos los servicios de coordinación de seguridad y salud; efectivamente se ha revisado el protocolo, se riega y se humedece, como debe de hacerse toda la estructura de madera cuando se actúa con cualquier maquinaria que produzca calor, y se estaba haciendo todo con ese rigor», ha insistido el edil.
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Según su exposición, el encargado abandonó la obra las seis de la tarde cuando el resto del personal ya se había marchado. «Sigue un protocolo riguroso, porque hay un control de seguridad y salud en la obra absolutamente férreo y me consta; cerró perfectamente y dejó desconectados todos los alimentadores eléctricos, se desconectan los magnetotérmicos, los diferenciales, por lo tanto, no hay corriente», explicó.
El responsable municipal ha subrayado que el edificio «queda sin corriente siempre». Los bomberos lo han podido comprobar durante su intervención de madrugada. «Han dicho que todos los magnetotérmicos y todos los diferenciales estaban bajados», insitía Zarandona. «En todos estos sucesos hay una parte que es fortuita, evidentemente sabemos que debe de tomarse las medidas que se toman, que es el regado, el humedecer si cabe mucho más toda la viguería de madera que se desmonta, y entiendo que no va a volver a pasar; todo el mundo tiene que estar tranquilo, no va a volver a suceder un episodio como este, que es realmente extraño», valoraba.
Zarandona ha destacado que las dos empresas adjudicatarias, Cabero Edificaciones y OHLA, así como la firma que lleva a cabo las demoliciones, actuán con gran responsabilidad y conocimiento al ser expertas en este tipo de trabajos de rehabilitación y más en un inmueble como el Lope que presenta un estado «peligroso». El responsable del área ha descartado también que el fuego se pudiera haber originado por una colilla mal apagada. «Se ha dicho por activa y por pasiva, aquí está prohibido fumar dentro de la obra y dentro del teatro, por lo tanto no se fuma, colillas no han podido ser», ha abundado apelando a la profesionalidad de las compañías que están reformando la sala.
Zarandona ha reiterado que los responsables del Servicio de Extinción no tienen clara la causa y ha pedido unos días para que los Bomberos puedan avanzar en una investigación que se aventura compleja. «Lo único claro y fehaciente, a la hora en la que nos encontramos, que son las doce menos diez de la mañana, es que el teatro sigue allí, que el teatro no ha sufrido ningún daño, que las obras van a seguir con los plazos previstos», subrayaba Zarandona. El edil añadía que en los edificios históricos, «por sus propias características y estructura de madera, a veces suceden episodios incontrolables y muy difíciles de prever«, recordando los incendios sufridos en el Liceo de Barcelona o en Notre Dame.
El concejal ha respondido también a las protestas de los vecinos del número 4 de la calle Veinte de Febrero por la altura de 28 metros de la futura caja escénica con la que contará el inmueble. «Las críticas desde luego hay que escucharlas y hay que explicarlas; obviamente intervenir hoy en un teatro para adaptarlo a las nuevas exigencias que tienen todos los espectáculos requiere de una caja escénica suficientemente grande para poder albergarlos», señalaba. A su juicio, «sería absurdo invertir lo que municipalmente nos estamos gastando para que al final no pudiera albergar cualquier tipo de oferta teatral, operística o de cualquier tipo cultural porque no pudiera albergarla. Eso se criticaría profundamente», zanjaba recordando, eso sí, que es un proyecto heredado del gobierno del PSOE y Toma la Palabra.
Respecto a las críticas del PSOE por las fotos que el alcalde se hacía a primera hora de la mañana en el lugar del suceso con los efectivos que habían participado, ha lamentado que «en vez de estar ayudando, apoyando y felicitándose» de que el incendio haya quedado en un susto opte por aprovecharlo políticamente. «Me gustaría que alguna vez manifestara sus opiniones de otra manera y entiendo que para la ciudadanía es importante que los que estamos en estos momentos en las responsabilidades del gobierno, asumamos desde el instante cero la responsabilidad, por eso venimos, visitamos y acompañamos a todos los efectivos que están actuando».
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