El Ayuntamiento baraja añadir un carril más para el tráfico en el tramo final de Isabel la Católica

«Ahí nos planteamos la posibilidad de ampliar a dos carriles en ese último tramo. Se está estudiando y hay espacio suficiente para permitir que los vehículos que van a girar hacia el puente se pongan en el carril derecho y los que vayan a seguir de frente estén en el izquierdo para que todos los vehículos puedan pasar cuando se abra el semáforo», apuntó Óscar Puente. La idea pasa por mover la mediana para no restar espacio ni al nuevo carril bici ni a la acera existente. Hay complicaciones técnicas para efectuar este cambio ya que en ese punto está la ventilación del 'parking' de Isabel la Católica.

No es la única variación que baraja el Ayuntamiento. Hay otras ideas en marcha para aumentar la eficiencia de los autoubuses.

«En Fuente Dorada estamos estudiando que las líneas 1 y 2 de Auvasa eviten la Bajada de Libertad y circulen por Fray Luis de León. Al dejar de girar a la izquierda, no invadirían el carril de vehículos y pueden evitar embotellamientos», subrayó Puente.

El alcalde recordó que «la Bajada de la Libertad no podía ser un distribuidor de tráfico» y que «no tenía sentido que la gente que quería ir de una punta de la ciudad utilizase Cebadería para acortar por el centro», al tiempo que defendió la idoneidad de los cambios acometidos en la movilidad.

El temor en el equipo de gobierno es que la pérdida de un 40% de usuarios en el transporte público, debido a los temores que infunde la pandemia, suponga un incremento del uso del coche. «Si de ese 40% un 10% se nos va al vehículo privado, da igual lo que hagamos: la ciudad se nos va a colapsar. Por eso necesitamos actuar con urgencia. La contaminación causa 300 muertes al año en la ciudad de Valladolid. No podemos protegernos de una amenaza como es el virus y sustituirla por otra como es la contaminación», declaró el alcalde de Valladolid.

Puente lamentó que el grupo municipal popular haya retirado su apoyo al presupuesto de 2021 como consecuencia de los cambios en la movilidad. «Si renuncia a ser útil porque se cree imprescindible, se equivoca. El equipo de gobierno no necesita al Partido Popular para sacar los presupuestos adelante, pero sus aportaciones podrían ser útiles. Me cuesta entender que porque no estén de acuerdo con algunas medidas renuncien a la posibilidad de mejorar el presupuesto. De esa manera, castigan a los ciudadanos al renunciar a aportar ideas. Espero que recapaciten», apuntó Puente en un tono conciliador.

El alcalde de Valladolid recordó que es «normal» que existan diferencias con el PP ya que «los modelos de ciudad son diferentes». «El Partido Popular defiende un derecho que no existe: el de ir en coche a todas partes. Lo que sí existe es un derecho a la movilidad, para que la ciudadanía se mueva de la manera más eficaz posible y, en los tiempos que corren, de la manera más limpia posible. En breve saldrá una ley que obligará a los ayuntamientos a acotar una zona de bajas emisiones. Queremos estar preparados».

Óscar Puente defendió al concejal de movilidad, Luis Vélez, y recordó que todas las medidas adoptadas cuentan con su apoyo como regidor. «No las toma por su cuenta ni a la ligera. El gerente de Auvasa ha explicado con datos y gráficos cuál es la ocupación de las calles que se están peatonalizando o donde se añaden carrriles-bici. Las decisiones tienen un carácter científico. Queremos que el espacio de la ciudad se comparta».

El alcalde esgrimió datos: los desplazamientos en vehículos privados en Valladolid no superan el 30% y, por lo tanto, argumentó que «no tiene sentido» que los coches ocupen casi el 100% del espacio para la circulación. «Habilitar los carriles bici, por donde ahora es verdad que pasan pocas bicis, tiene un propósito: facilitar la utilización de ese medio de transporte, limpio y saludable, para que los ciclistas se sientan seguro. Me sorprenden los argumentos de que aquí en invierno hace mucho frío: también hace frío en Copenhague, Ámsterdam o Berlín», citó Puente, en referencia a las ciudades con altas tasas de ciclistas urbanos y grandes infraestructuras para bicicletas.

«Entiendo que son cambios difíciles y que al principio no se entienden. Yo he sido usuario de la bicicleta, aunque ahora la uso menos por cuestiones de agenda. Es un medio de transporte tremendamente eficaz y muy cómodo para una ciudad como Valladolid por su orografía», añadió Puente.

Otro de los retos del equipo de gobierno municipal pasa por aumentar la velocidad comercial de los autobuses urbanos, actualmente muy baja. «Si queremos que el autobús sea eficiente le tenemos que dotar de plataformas reservadas. Si comparte vías con el resto de vehículos es menos competitivo. Si conseguimos que el peatón, ciclista y el viajero de transporte público se sientan más cómodo lograremos que los desplazamientos en vehículos privados no aumenten e incluso se reduzcan. Además, las calles peatonales redundan en beneficio del comercio porque incrementa las ventas. Estas medidas pretenden beneficiar al comercio para que compita con las grandes superficies y las ventas por internet», consideró Puente.