Ana Redondo, en su etapa como concejala de Cultura y Turismo de Valladolid. Alberto Mingueza
Perfil

Ana Redondo, una experta en Derecho Constitucional para sepultar la era de Irene Montero

La vallisoletana desembarca en Madrid con el aval de su perfil jurista, la experiencia parlamentaria de su etapa como portavoz del PSOE en el parlamento regional y los ocho años de gestión municipal

Susana Escribano

Valladolid

Lunes, 20 de noviembre 2023, 14:35

Ana María del Carmen Redondo García (Valladolid, 1966), Ana Redondo, es la persona elegida por Pedro Sánchez para intentar que cerrar con siete candados la etapa en la que Unidas Podemos, con Irene Montero al frente, ha dirigido el Ministerio de Igualdad. El nombramiento de ... Ana Redondo como ministra de Igualdad ha sido la sorpresa de la mañana. Óscar Puente estaba en las quinielas de ministrables. Redondo no.

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«¿Dejar las Cortes por la política municipal? ¡No me arrepiento! La vida parlamentaria me apasiona, la he disfrutado muchísimo... Pero la vida municipal tiene algo muy positivo, que es la cercanía», valoró Redondo en 2015, cuando cerró dos legislaturas en el hemiciclo autonómico para abrir nuevo camino en Ayuntamiento de Valladolid.

La que durante ocho años fue teniente de Alcalde y concejala de Cultura, Educación y Turismo de Valladolid, en la oposición desde mayo al sumar PP y Vox mayoría en el consistorio pucelano, desembarca ahora en la política nacional. Será nueva en Madrid, pero no novata. Es una dirigente fogueada en el ámbito parlamentario en las Cortes de Castilla y León y con experiencia en la gestión que ha adquirido desde el tajo municipal. A eso suma una sólida formación como jurista. Licenciada en Derecho y Doctora en Derecho Constitucional, Redondo es profesora titular de Derecho Constitucional en la Universidad de Valladolid y la persona elegida por el presidente Pedro Sánchez para relevar a la ministra que llevó al Consejo de Ministros la conocida como ley del 'sólo sí es sí' que tantos quebraderos de cabeza ha dato al PSOE por una redacción que ha abaratado condenas y puesto en la calle a agresores sexuales y violadores. En descargo de la finiquitada Irene Montero juega el hecho de que en el Gobierno hubiera tres jueces en la parte del PSOE a los que se les pasó por alto.

«No tenemos por qué aguantar más a un machista que no nos representa», aseguró sobre el alcalde Javier León de la Riva en 2015

Esa será la primera encomienda de Redondo, apaciguar un Ministerio de Igualdad que a un PSOE que ha hecho tradicionalmente bandera del feminismo se le había ido de las manos al pasar bajo gestión de los morados. Pedro Sánchez recupera esa cartera en la nueva coalición con Sumar y encarga a la vallisoletana un departamento que ha ganado peso político. Por la gestión de su predecesora y por la llegada de Vox a gobiernos autonómicos y municipales. Los de Abascal disparan ahora desde las instituciones, tras sus pactos de gobierno con el PP de Alberto Núñez Feijóo, contra todo lo que suene a feminismo, violencia de género y políticas de igualdad. Se ha visto en Castilla y León con asuntos que han ido desde el protocolo antiaborto a la exigencia de una Ley de Violencia Intrafamiliar o las polémicas por las banderas arco iris en edificios públicos. Ahí van a topar ahora institucionalmente con Ana Redondo. El acuerdo entre PP y PSOE que fraguó la actual Ley de Lucha contra la Violencia de Género de Castilla y León es de la etapa en la que ella comandaba el Grupo Socialista en las Cortes, en 2010.

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De la dirigente socialista hay pronunciamientos en cuestiones de igualdad de esa etapa de parlamentaria autonómica. ¿Recuerdan las declaraciones sarcásticas de Javier León de la Riva definiendo a Leire Pajín, ministra de Sanidad y de Igualdad con Rodríguez Zapatero, como «la de los morritos» y las insinuaciones sobre la boca de la dirigente socialista con aquel «cada vez que veo los morritos de Leire Pajín pienso lo mismo»? ¿Y esas otras en las que el entonces alcalde del PP aludía a su miedo como hombre a subir en un ascensor con una mujer y planteaba como habitual que podían «buscarle las vueltas» si se «arranca el sujetador y la falda y dice que la han acosado»? Pues Ana Redondo fue la que descalificó esas declaraciones desde la bancada del PSOE en las Cortes y la que reclamó a los responsables del PP de Castilla y León, y «sobre todo a las mujeres del Partido Popular», que condenaran las manifestaciones de Javier León. «No tenemos por qué aguantar más a un machista que no nos representa. Las mujeres son decisivas en este viaje», lanzó durante la campaña electoral en la que el alcalde popular perdió la Alcaldía.

Con Óscar López, Javier Izquierdo...

Durante sus ocho años como procuradora autonómica, la inminente ministra de Igualdad fue portavoz del grupo parlamentario y responsable de controlar la labor de Juan Vicente Herrera como presidente de la Junta. El popular estaba en todo su apogeo político y electoral, quemando candidatos socialistas. Acababa de fundir a Ángel Villalba y estaba aterrizando Óscar López, que correría la misma suerte. En la bancada socialista coincidió la nueva ministra, con López, que es desde 2021 director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno y ve todos los días a Pedro Sánchez. También con Javier Izquierdo, exdelegado del Gobierno en Castilla y León y máximo responsable de la estrategia electoral de Ferraz, con línea directa con el presidente del Gobierno.

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López e Izquierdo conocen a Redondo, pero el principal aval de la experta en Derecho Constitucional para traspasar la entrada de La Moncloa lo firma Óscar Puente, que la ha llevado tres veces, en 2015, 2019 y 2023 tras él en la candidatura municipal y con la que ha completado ocho años de trabajo codo a codo en el Consistorio. En manos de Redondo ha estado la Seminci y la gestión de Valladolid como capital de los pinchos; el Teatro de Calle y las programaciones de los teatros Calderón o Lava; la gestión del Museo Patio Herreriano o el trabajo para atraer turistas y visitantes a la ciudad. Con un respaldo sin complejos a la Semana Santa y quitando la subvención municipal a los toros.

Ana Redondo saluda a Juan Vicente Herrera, en la etapa en la que ella fue portavoz del PSOE en las Cortes y el popular era presidente de la Junta. El Norte

Ana Redondo compartió escenario el pasado mes de mayo con Pedro Sánchez, en el mitín que el secretario general del PSOE protagonizó en la Feria de Valladolid. Allí se declaró sanchista a tope, en una ardorosa intervención. Va a tener ocasión de demostrarlo en la capital de España, en una legislatura que se prevé muy correosa. Con una oposición contundente de PP y Vox y, siempre presente, el continuo pulso y las exigencias de los nacionalistas e independentistas catalanes y vascos necesarios para que el PSOE sume mayoría.

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La puntualidad, asignatura pendiente

Quienes conocen y han tratado habitualmente a la nueva ministra, casada con el magistrado vallisoletano y novelista Ignacio Martín Verona y madre de dos hijas, hacen apuestas por ver si los Consejos de Ministros empiezan a su hora. Si es así, será porque su equipo en el Ministerio de Igualdad logra que cumpla la agenda y llegue puntual a citas, reuniones y actos oficiales.

«Los socialistas sólo sabemos gobernar de una manera. Con la gente y para la gente», ha defendido la vallisoletana, que podía escuchar desde los Beatles a Queen, Robbie Williams o The Smiths para desconectar y consideraba «lo mejor que hay» a Radio Futura. El revés electoral de mayo, que apeó a los socialistas de la Alcaldía impidió que Redondo viviera como anfitriona la llegada del cantante de ese grupo, Santiago Auserón, a la alfombra verde.

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La decisión de Sánchez de meter en su Gobierno al tándem Puente-Redondo da un giro de película al ambiente político en Valladolid. Por de pronto, les propociona localidad vip en febrero para la Gala de los Goya que levantará el telón junto al Pisuerga. Esa por la que pelearon y que dejaron en traspaso a Jesús Julio Carnero. Podrán vivirla como ministros de España.

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