«Alexa, pon una de Manolo Escobar». Esta es la frase más repetida en los últimos meses en casa de Victoriana de Francisco quien, a sus 91 años, es una de los 150 mayores de Valladolid a los que se les han instalado diferentes tecnologías ... en sus viviendas para ayudarles en su día a día dentro de un proyecto piloto del Ayuntamiento. Alexa, el asistente virtual de Amazon, es solo uno de los dispositivos que forman parte de esta experiencia, en la que un sensor de movimiento para detectar caídas en los domicilios es el elemento más práctico para los mayores con problemas de movilidad.
Publicidad
Victoriana asegura no precisar de sensores de caída porque ella está muy bien para la edad que tiene. Tanto, que tiene por costumbre salir a dar un paseo a diario y disfrutar, en la medida de sus posibilidades, de la vida en la calle. No obstante, asegura que el hecho de vivir sola le lleva a precisar de algunas atenciones que le brinda su 'nueva amiga', Alexa. «Me hace mucha compañía. Cuando me la llevaron no me parecía que me podía ser tan útil como ahora. Es una de las mejores cosas que han podido inventar para que las personas mayores que vivimos solas estemos entretenidas», explica esta nonagenaria, que ve, además, en este dispositivo una excelente manera de ponerse en contacto con la empresa gestora del servicio de ayuda a domicilio municipal. «Podemos llamar a la oficina para preguntar cualquier cosa o para avisar si nos ha pasado algo», recalca esta mujer.
Noticia Relacionada
Pero Victoriana no solo llama al asistente virtual de Amazon cuando quiere poner música o hablar con los responsables del servicio de ayuda a domicilio, también utiliza «el aparato» para hablar por videollamada con Santiago Guzón, otro de los usuarios del servicio que solo tiene parabienes hacia esta iniciativa. «Esta es una buena manera para que los que vivimos solos nos sintamos seguros y tengamos compañía», explica Santiago con unas palabras que no suscriben todos los usuarios, tal y como reconocen desde la empresa que gestiona el servicio. «Hemos tenido el caso de una señora que tiró a Alexa a la basura porque pensaba que ese cacharro no le valía para nada. Hay gente que no le saca jugo, a la que le cuesta aprender a usarlo porque no son nativos digitales y esto se les resiste. Pero otros le cogen el 'truquillo', entienden la funcionalidad y -como Victoriana y Santiago- llegan incluso a contactar entre ellos», explican desde Clece.
Victoriana lleva 35 años viuda y afirma que cuando dice eso de «Alexa, pon una de Manolo Escobar» hay una gran dosis de nostalgia en esa frase. «Mi marido era conductor, he viajado mucho con él, teníamos cintas de las que se llevaban entonces y siempre me ponía a Manolo Escobar. Así que, cada vez que pido a Alexa una canción suya me acuerdo de él», reconoce Victoriana con añoranza, pero no con tristeza. «Cuando uno vive solo, puede estar triste o alegre. Cada cual lleva su vida por el camino que puede y si uno se quiere hundir, lo va a acabar consiguiendo. Yo intento salir adelante, con mis alegrías y mis tristezas, pero siempre pensando que, por muy mal que estés, puedes estar peor», incide esta nonagenaria, que ha encontrado en el Porompompero 'made in Alexa' todo un remedio para sus males. «Ya se sabe que el que canta, sus males espanta», concluye.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.