Valladolid

El albergue incrementa sus camas de refuerzo con la llegada de las temperaturas bajo cero

El concejal de Personas Mayores, Familia y Servicios Sociales, Rodrigo Nieto, explica que este protocolo de intervención con motivo de las olas de frío (así se llama) está listo para su puesta en marcha desde comienzos de noviembre, pero no ha sido hasta este martes cuando ha sido necesaria su activación, con la llegada de nuevos usuarios al albergue.

Trabajadores del Ayuntamiento, así como responsables de Intras y de Cruz Roja, contactan en la calle con las personas que duermen a la intemperie para explicarles la posibilidad de que pernocten bajo techo, en el albergue. «No todos quieren y a nadie se le puede obligar», evidencia Nieto, quien recuerda que, en esos casos, se disponen de mantas y de sacos de dormir que se ofrecen a los indomiciliados para que atraviesen mejor estas jornadas de bajas temperaturas.

Si fuera necesario (y el martes fue el primer día de la temporada), se habilitan esas camas de refuerzo, entre las que dispone el propio albergue y las supletorias que se facilitan desde Protección Civil. «Esta situación extraordinaria por ola de frío se suele prolongar durante 60 jornadas, aproximadamente, hasta que las temperaturas dejen de estar por debajo de cero grados», apunta Nieto.

La primera vez en la que este otoño se ha caído a esos valores negativos fue el 3 de diciembre, cuando el mercurio se desplomó hasta los -1,2 grados. Tan solo unos días antes, el 29 de noviembre, la temperatura mínima registrada en Valladolid fue de 10 grados. En lo que va de mes, ha habido ocho jornadas con temperaturas bajo cero. La más fría fue, precisamente, ese martes en el que fueron necesarias por primera vez las camas complementarias. Se registró el valor más bajo (con -2,4 grados), pero además, las temperaturas máximas no llegaron a los dos grados.

Durante los diez primeros meses del año, 573 personas pasaron en algún momento por el albergue (de ellas, 433 eran hombres y 150 mujeres), con un total de 18.345 pernoctaciones. La gestión de este centro está contratada con la Fundación Intras, que proporciona atención integral las 24 horas del día. Además de la pernoctación y el aseo, ofrecen desayuno y atención individual, con información y asesoramiento para favorecer su integración.

Además, durante estos días, los servicios sociales han programado unas acciones especiales para las personas indomiciliadas con motivo de la Navidad. En el albergue hay «actividades más familiares y cercanas» y en el comedor social se han diseñado unos menús específicos para Navidad, Año Nuevo, Reyes y las vísperas de estos tres festivos. Así, se servirán alimentos habituales en las mesas navideñas, como lechazo, merluza o roscones.