El aguacero caído sobre la ciudad, que ha dejado cerca de diez litros por metro cuadrado en apenas una hora (entre las tres y las cuatro de la tarde), ha complicado de manera notable la circulación en las principales vías de la capital, donde se ... han generado enormes balsas de agua que en algunos puntos, ya tradicionales, como la calle Padre José Acosta han obligado directamente a cortar la circulación en sentido de salida a Zaratán.
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La jornada de este martes es ya, de hecho, la más lluviosa del año con más de treinta litros por metro cuadrado recogidos hasta las siete de la tarde, y con la previsión de que continúa lloviendo en las próximas horas. El diluvio de este martes eleva de manera más que notable el balance hídrico del presente mes, que suma ya un amplio superávit de precipitaciones con 79 litros por metro cuadrado recogidos hasta la fecha, 34 más de lo habitual para el conjunto de diciembre (45).
Las precipitaciones, en el caso de hoy, han comenzado de manera tímida por la mañana para ir incrementándose a partir de las tres de la tarde, cuando se ha recogido el grueso de los cerca de treinta litros y se han generado enormes balsas de agua en puntos habituales de la avenida de Salamanca, el barrio de Parquesol (en el cruce de Ciudad de la Habana con Juan García Hortelano) o el Paseo de Zorrilla, como en la esquina con la avenida de Medina del Campo, a la altura de la plaza del Doctor Quemada, donde el nivel del agua rozaba a media tarde los bordillos y dificultaba de manera notable la circulación.
Más agua aún se ha acumulado en la subida hacia Zaratán (calle Padre José Acosta), que ha tenido que ser cortada por la Policía Local para permitir la labor de los operarios de desatascar los sumideros, repletos de hojas tanto en este como en otros puntos de la capital, para desaguar la enorme cantidad de agua que impedía directamente el paso de los vehículos.
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En lo que va de mes se han recogido ya 79 litros por metro cuadrado, una cantidad que permite minimizar el déficit hídrico que arrastraba el conjunto del año, que a día de hoy se sitúa en apenas el 15%, con 372 litros recogidos hasta ahora, 61 menos de lo habitual para todo el año (433).
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Las últimas lluvias están ocasionando un crecimiento de los caudales de los ríos de toda la cuenca del Duero, con incrementos notables en algunos de ellos, como el Eresma, que este martes ha superado su caudal de alarma con 35 metros cúbicos por segundo a su paso por Segovia. La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene ahora la vigilancia en todos ellos en previsión que los caudales continúen creciendo. En el caso de Valladolid se mantiene una especial vigilancia a los caudales del Esgueva y del Duero, que por ahora se encuentran por debajo de sus niveles de alerta.
Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apuntan a que continuará lloviendo en abundancia, al menos, hasta el próximo viernes, si bien no se esperan cantidades como las registradas en la jornada de este martes, que se sitúa ya como la más lluviosa del año en Valladolid, con 32 litros recogidos hasta las siete de la tarde. El segundo día con más precipitaciones tuvo lugar el domingo pasado, cuando se recogieron 17,4 litros. Solo en abril y octubre se registraron dos días casi tan lluviosos, con 16,4 litros caídos el 22 de abril y 15,8 el 20 de octubre.
El responsable de esta situación es un «río atmosférico» causado por una borrasca bautizada como Efraín, que está impulsando «una corriente de aire muy cargada de humedad desde prácticamente el Caribe hasta la península ibérica», lo que genera una sucesión de frentes que están dejando aguaceros considerables por prácticamente todo el país.
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