Valladolid
Acusan a un taller de estafa y se llevan su tractor «por la fuerza»Tribunales ·
La propietaria del vehículo, una empresa de Olmedo, ha denunciado que las facturas, que suman 10.500 euros, están «infladas»Valladolid
Acusan a un taller de estafa y se llevan su tractor «por la fuerza»Tribunales ·
La propietaria del vehículo, una empresa de Olmedo, ha denunciado que las facturas, que suman 10.500 euros, están «infladas»Sacaron «por la fuerza» el tractor de las dependencias del taller al que un mes antes habían confiado el vehículo para su reparación. El dueño del servicio mecánico se negaba a dejarlo salir de allí hasta que le abonaran las dos facturas. Bajo la sospecha ... de que no se ejecutó la reparación contratada, sino que se había realizado un simple lavado de cara para simular que se habían sustituido piezas por otras nuevas, los dueños del vehículo decidieron denunciar al taller por supuesta por estafa y coacciones. El asunto ya está en manos de un juzgado de instrucción de Salamanca.
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La propietaria del tractor, la empresa Servicios Plus Vidal de Pedro SL, con domicilio social en Olmedo (Valladolid), que se dedica al comercio al por mayor de maquinaria, equipos y suministros agrícolas, se niega a abonar al taller salmantino Basilio Peral SL esas dos facturas, que suman 10.462 euros porque, según refiere la denuncia, no se realizó la sustitución de piezas contemplada en las órdenes de reparación para las partes trasera y delantera del vehículo agrícola.
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Para respaldar esta denuncia, los representantes de la empresa vallisoletana aportan un informe pericial elaborado por un ingeniero técnico industrial en el que se calcula que la suma de las dos órdenes de reparación de daños alcanzaría la cuantía de 2.425 euros con lo que, argumentan, las facturas presentadas por el taller «están infladas» porque reclaman una cifra cuatro veces superior a lo que valdrían las piezas. «Las piezas Massey Ferguson son piezas numeradas y si se han metido en la factura pero no las han pedido a la casa, no las han podido poner», explican fuentes jurídicas. «Como se aprecia en las fotos que aparecen en el informe pericial, no les han cambiado las placas, se las han soldado, pintado y se las han vuelto a poner», subrayan estas fuentes.
El pasado 19 de abril, a petición de la empresa denunciante se presentaron en el taller ubicado en el polígono de Villares de la Reina los peritos de parte para inspeccionar el tractor, pero en aquella ocasión se les impidió llevar a cabo dicha inspección y también se les negó la documentación relativa a la orden de reparación del vehículo, depósito, presupuesto y albaranes de compra. Lo mismo le ocurrió al perito de Mapfre. Después de insistir, finalmente los técnicos pudieron realizar la inspección en del vehículo en una calle de ese polígono. La reparación contratada consistía en sustituir los paneles que recubren el motor, en la parte delantera, y los dos guardabarros, protectores y luces de la parte trasera.
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Según el informe pericial, los paneles que recubren el motor tenían aspecto de «haber sido pintados» y, una vez desmontados, observaron «en la parte interior cordones de elemento adhesivo sobre las rejillas negras que van ensambladas con los paneles». A su juicio, «los paneles no fueron sustituidos sino que se llevó a cabo el ensamblaje de dichas piezas negas de rejillas fijadas al panel. Tampoco se dispuso ninguna calcomanía en dichos paneles». Respecto del arreglo de la parte trasera, los técnicos concluyen que no se colocaron nuevos guardabarros, ni protectores ni luces. «Los guardabarros fueron reparados, fijados con tornillería y pintados, tampoco se sustituyeron los dos protectores negros ni las luces, ya que tienen aspecto de no ser nuevas, con algún detalle de óxidos y degradación de las ópticas que denotan su antigüedad».
A la vista de las «anomalías», los peritos valoran el importe de la primera factura en 755 euros y de la segunda, correspondiente a la reparación de la parte trasera del tractor, en 1.789 euros. Unos importes muy alejados de las facturas presentadas por el taller al cliente, de 6.914 y 3.537 euros, respectivamente.
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La denuncia por supuesta estafa se interpuso el pasado 5 de mayo en los juzgados de Salamanca. En ella se relata que el 7 de marzo la empresa Vidal de Pedro entregó a talleres Basilio Peral el tractor. Tras la reparación -que el cliente sospechaba que no se había llevado a cabo por lo que se negó a abonar las facturas «excesivas»- quiso llevarse el vehículo, pero el gerente del taller se negó a entregarlo, «reteniendo nuestra herramienta de trabajo y causándonos un perjuicio económico bastante grave». Argumentan, en este sentido, que no pudieron cumplir el contrato de servicios que tenían con una tercera empresa. Les dijeron que «sin abonar antes las facturas no iban a permitir enseñar el tractor ni entregar las piezas, lo que ya es una coacción y un incumplimiento de la Ley de Talleres».
El 19 de abril, los propietarios decidieron recuperar el tractor «a la fuerza» y pudo realizarse la peritación. Desde la administración del taller salmantino se han limitado a indicar que las facturas del trabajo realizado han sido reclamadas por la vía judicial, si bien el gerente de dicho establecimiento no ha querido hacer valoraciones sobre la denuncia.
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