Valladolid

Acceden a un ático por la ventana para auxiliar a una anciana caída en Delicias

El rescate, más habitual de lo deseado en la capital, ocurrió pasadas las diez de la mañana en el bloque de viviendas del número 50 de la calle Embajadores, situado en las inmediaciones del cruce de General Shelly con la avenida de Segovia, en el corazón del barrio de Delicias. Allí, en el ático, a la altura de un cuarto piso, su inquilina sufrió una caída en el baño que le impedía moverse y activó el dispositivo de teleasistencia (habitualmente un medallón o pulsera con un botón de SOS conectado a una central de seguimiento telefónico). Así que poco después llegó una trabajadora de dicho servicio, pero se encontró con la puerta cerrada desde el interior, lo que le impidió el acceso a la vivienda.

Desde el propio servicio se alertó de lo ocurrido al 112 y a los pocos minutos de desplazaron al edificio de viviendas una patrulla de la Policía Local y una dotación del Servicio de Bomberos, cuyos efectivos comprobaron que era imposible entrar por la puerta (sin derribarla) y optaron por desplegar la escala desde la calle, que se cortó a la circulación, para acceder finalmente por la ventana del ático al domicilio de la víctima.

Allí localizaron a la anciana impedida, que estaba caída en el baño, y la ayudaron a levantarse sin que la víctima sufriera, en principio, mayores consecuencias del accidente doméstico. «Ella misma, una vez en pie, rechazó ser trasladada al hospital y el rescate se quedó, por fortuna, en un susto», apuntan fuentes policiales.

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Desde el Cuerpo de Bomberos, eso sí, recuerdan la importancia, especialmente en el caso de mayores que viven solos, de no cerrar las puertas con llave desde el interior o con algún tipo de cerrojo. «Eso impide entrar rápidamente a prestar ayuda y siempre retrasa los rescates», explican los especialistas, que prácticamente a diario realizan este tipo de auxilios en domicilios de la capital.

El sistema de teleasistencia, no obstante, funcionó en esta ocasión a la perfección y facilitó el rápido auxilio, aunque con el retraso ocasionado por el cierre de la puerta desde el interior, de la inquilina del ático del número 50 de la calle Embajadores.