'Trucos' de la DGT para ahorrar combustible durante los viajes en verano

El verano es una época de vacaciones y desplazamientos en la que los desembolsos relativos a actividades de ocio y viajes se acentúan aún más teniendo en cuenta los gastos en materia de combustible.

Sin embargo, existe una serie de pautas y recomendaciones con las que se podrá ahorrar «hasta 500 euros al año», tal y como afirma la Dirección General de Tráfico (DGT), además de reducir las emisiones y alargar la vida útil tanto del vehículo como de muchos de sus componentes.

No obstante, es preciso tener en cuenta que existen ciertas rutinas básicas de mantenimiento periódico «sin las cuales nada de lo que hagamos va a funcionar con la misma eficacia», afirman desde la entidad. Por este motivo, es esencial llevar a cabo una correcta puesta a punto en el taller una vez al año, especialmente en aquellos vehículos con mayor antigüedad.

Otra de las acciones clave a la hora de reducir el consumo consiste en llevar una presión adecuada en los neumáticos. De acuerdo con RACE «conducir usando neumáticos con una presión de 0,5 bares inferior a la recomendada por el fabricante hace que el consumo aumente en un 2% en áreas urbanas y un 4% en zonas interurbanas».

Además, durante el verano es habitual viajar con el coche muy cargado de equipaje, lo que requiere aumentar esa presión con la referencia del fabricante indicada en la tapa del depósito del combustible o en el marco de la puerta del piloto. De no hacerlo, a parte de incrementarse el consumo, aumentará el desgaste del neumático obligando a adelantar su reemplazo. A este respecto, según la DGT, «existe un tipo de gomas disponibles en casi todas las marcas fabricantes que se caracterizan por una muy baja resistencia a la rodadura, ideales para ayudar a reducir el consumo (hasta en un 3%) y con precios muy similares a los neumáticos convencionales».

La Dirección General de Tráfico afirma que «entre el 30 y el 50% del gasto de combustible depende de la manera de conducir del propietario». Por este motivo, cambiar diferentes conductas a la hora de manejar un vehículo puede repercutir de forma positiva sobre el consumo de combustible, contribuyendo de esta forma al ahorro.

El gasto de combustible, según explica la DGT, se puede reducir de forma muy marcada con la tendencia a conducir en la marcha más larga posible, incluso en la ciudad (siempre adaptando este hábito a las condiciones tanto de la vía como del propio vehículo). Y lo cierto es que los motores que incorporan los vehículos en la actualidad responden de forma adecuada a pesar de circular en marchas largas a muy bajas revoluciones con el motor muy desahogado y consumiendo lo mínimo. En este sentido, es altamente recomendable no apurar las marchas cortas a no ser que se arranque el vehículo en una cuesta muy pronunciada.

La DGT recomienda tomar como referencia que «antes de llegar a los 50 km/h ya deberíamos haber engranado la cuarta o quinta marcha». Volviendo a la ciudad y en caso de que el coche no cuente con el sistema 'Start/Stop', es muy recomendable parar el motor durante las detenciones.

Además, en caso de que el vehículo cuente con modo de ahorro de combustible o 'Modo ECO', desde la DGT recomiendan activarlo, ya que este permitirá circular por la carretera asegurando las marchas más bajas posibles.

De cara a reducir al máximo los hábitos de conducción que incrementan el consumo de combustible, la DGT aconseja seguir pautas como el «mantener una velocidad moderada y constante, sin altibajos ni cambios de ritmo frecuentes»; así como asegurar la distancia de seguridad, lo que permitirá «circular sin la necesidad de estar pendiente del freno».

En la reanudación de la marcha tras la salida de un semáforo, lo recomendable es acelerar de manera progresiva y cambiar aprovechando el mejor rendimiento del motor. «De lo contrario, se llegará al siguiente semáforo algunos segundos antes que los demás vehículos, pero consumiendo tres veces más». «También sería interesante, si es posible, anticiparse y dejar de acelerar al ver a lo lejos un coche, un camión o un autobús circulando más despacio para llegar con inercia en retención sin gasto de combustible».

Precisamente, esto es mucho mejor que continuar acelerando hasta dar alcance al vehículo que nos precede y frenar para, más tarde, tener que recuperar esa velocidad, obligando al motor a revolucionarse de nuevo con el consiguiente gasto. «Anticiparse permite no solo ahorrar combustible, sino también reducir el desgaste de las pastillas de freno», afirman desde la Dirección General de Tráfico.

La DGT advierte que llevar el aire acondicionado conectado sin necesidad es algo a evitar, ya que supone que el consumo del vehículo aumente entre un 10% y un 20%. Por este motivo, es necesario optimizar su uso y, por supuesto, llevar las ventanillas cerradas correctamente en la carretera «porque todo lo que suponga romper la aerodinámica de un vehículo está irremediablemente asociado a consumir más».

El equipaje juega un papel fundamental tanto en el consumo de combustible como en la seguridad del conductor y los ocupantes. Por ello, deberá ir correctamente distribuido, evitando así un reparto irregular del peso que pueda ayudar a desgastar de forma desigual los neumáticos y aumente el consumo de la gasolina o diésel.

En este sentido, y en caso de que el maletero «se quede pequeño», puede ser de utilidad recurrir a un baúl o portaobjetos de techo cerrado que cuente con formas aerodinámicas, en lugar de posicionar el equipaje de forma desordenada en una baca con pulpos o cuerdas, ya que «además de ser peligroso, aumenta notablemente el consumo». «El conductor español tiene la mala costumbre de convertir el maletero de su vehículo en una especie de trastero donde tiene cabida lo que uno se pueda imaginar y, en realidad, actualmente son muy pocas las cosas necesarias», concluyen desde la DGT.

• Temas
• RACE Real Automovil Club de España
• DGT Dirección General de Tráfico
• Consejos sobre ruedas