El café y el té son dos de las bebidas a las que está enganchada un gran número de personas, la mayoría toma más de dos tazas al día. El consumo diario moderado es beneficioso para la salud, sin embargo, abusar de su ingesta podría provocar problemas graves de salud, debido a su alto porcentaje de cafeína y teína. Un estudio realizado por investigadores españoles del Centro de Investigación Biomédica en Red Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición y de la Universidad Rovira i Virgili y del Hospital Universitario Joan XXIII de Tarragona concluye que el consumo de cafeína en personas mayores con obesidad y enfermedades cardiovasculares puede aumentar el riesgo de padecer problemas relacionados con la función renal.
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Asimismo, existen otras personas en casos puntuales o por causas crónicas a las que los expertos recomiendan reducir al mínimo o eliminar el consumo de bebidas como el café y el té. Los dos motivos principales están relacionados con la fertilidad y con los problemas de salud puntuales, por lo que se pueden enumerar siete grupos de personas a las que pueden afectar negativamente.
Los expertos recomiendan reducir el consumo de cafeína a aquellas personas que se están sometiendo a un tratamiento de fertilidad.
Personas que les afecta a la digestión y les provoca problemas de acidez o reflujos.
Las personas que están intentando quedarse embarazadas es recomendable que disminuyan el número de tazas diarias.
Los individuos que padecen de insomnio.
Aquellos que están siguiendo un tratamiento, ya que la cafeína puede influir en algunos medicamentos y variar su efectividad.
Paciente que sufren osteoporosis
Las personas que sufren quistes en los pechos pueden desarrollar molestias debido a la cafeína.
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Paula Ortiz
En la investigación realizada por expertos españoles, se analizó la frecuencia de consumo de café, té y cafeína de más de 5.800 pacientes. Y, en ella, se concluyó que las personas que toman más de dos tazas al día poseen un deterioro mayor de la tasa de filtración glomerular y su riesgo de sufrir un deterioro rápido de la función renal aumenta más de un 19%.
Por el contrario, los resultados desvelaron que esta relación no se produce cuando se trata de café descafeinado, por lo que se recomienda a las personas de mayor edad con problemas de obesidad o enfermedades cardiovasculares que reemplacen la cafeína por productos que no la tengan. Este pequeño cambio puede ayudar a mantener una buena salud de los riñones y prevenir la enfermedad renal crónica, es decir, cuando fallan los riñones y se necesita diálisis o un trasplante.
Sin embargo, el consumo moderado de café produce beneficios para la salud, como la reducción de los dolores generados por la jaqueca y del riesgo de padecer insuficiencia cardiovascular o un derrame cerebral. Además, favorece el rendimiento físico de los atletas, ya que aumenta la resistencia y la respuesta psicomotora.
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Por su parte, la ingesta de té también posee ventajas para el organismo: ayuda en la regeneración de las células del cuerpo y el retraso del proceso de envejecimiento natural; acelera el metabolismo, que ayuda a la eliminación de grasas acumuladas; evita la expansión de las células que provocan tumores cancerígenos; disminuye los niveles de estrés; controla los picos de ansiedad; y favorece la digestión.
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