Aceites vegetales: los mejores aliados para evitar las estrías del embarazo

Es muy común que las embarazadas sufran picores en la barriga a medida que avanza la gestación y pueden aparecer las temidas estrías, esas líneas que se forman en la piel cuando se gana o pierde peso muy rápidamente. Para tratar y prevenir ambos problemas existen infinidad de cremas en el mercado, pero hay que tener en cuenta que muchas de ellas contienen aceites minerales, que son productos obtenidos de la destilación del petróleo. Al ser 'familia' del plástico porque vienen del mismo origen (petróleo) estos productos pueden impedir que los agentes hidratantes penetren en la piel. Suelen proporcionar una sensación de hidratación instantánea porque forman una película suave sobre la epidermis pero al poco tiempo sentimos la necesidad de hidratar de nuevo.

Además, el Ministerio de Sanidad reconoce que «existe una posible preocupación sanitaria sobre estos componentes y es necesario recopilar información que permita hacer una evaluación más precisa y se despejen las incertidumbre que acompañan a los aceites minerales», aunque su conclusión se refiere al sector de la alimentación y no al cosmético. Por otra parte, la OCU se pronuncia sobre el uso de los aceites minerales en cosmética y advierte que estas «complejas mezclas de hidrocarburos pueden contener impurezas tóxicas». Esta organización advierte también de otros ingrdientes que podemos encontrar en productos cosméticos como siliconas, que «pueden contener impurezas tóxicas, y se sospecha que son tóxicos ambientales, persistentes y bioacumulables», y «conservantes que liberan formaldehído (DMDM hydantoin, imidazolidinyl urea, diazolidinyl urea), bronopol, parabenos», ya que «algunos pueden ser disruptores endocrinos y antimicrobianos (BHT, BHA, triclosán)».

Para garantizar la salud tanto de la embarazada como del bebé y conseguir una correcta y profunda hidratación de la piel la mejor solución es recurrir a los aceites vegetales. Eso sí, debemos asegurarnos de que sean 100% puros, sin otros ingredientes y obtenidos de primera presión en frío para asegurar que no contengan restos de químicos potencialmente peligrosos. Estos son los más adecuados para la piel durante el embarazo:

Posee un gran poder regenerante. De color ligeramente rojizo, presenta un elevado contenido en ácidos grasos esenciales (AGE) poliinsaturados implicados en la regeneración de los tejidos y el crecimiento celular. Por eso está especialmente indicado para prevenir y tratar estrías, manchas y cicatrices. También contiene vitaminas, A, C y E.

También llamado 'oro del desierto', técnicamente no es un aceite sino cera líquida vegetal que se obtiene de las semillas del arbusto de la Jojoba. es el más parecido a . ácidos grasos que contiene este aceite, sumado a su aporte de vitamina E. Coniene ácidos grasos y vitamina E. Su composición química es muy similar al del sebo producido por nuestro organismo. Por eso, actúa como seborregulador: hidrata sin obstruir los poros y no deja sensación grasosa.

Aporta excelentes propiedades antioxidantes y es uno de los aceites más ricos en vitamina E, muy beneficiosa para la piel. Por eso, previene la la flacidez y las estrías.

Es un aceite especialmente indicado para las pieles más sensibles. Actúa contra las irritaciones y los picores, calmando e hidratando la piel. Este aceite se obtiene macerando las flores en un aceite, normalmente de girasol. Sus propiedades son infinitas: antiinflamatorias, antisépticas, antiespasmódicas, antibacterianas, fungicidas, cicatrizantes, emolientes... etc.

También es adecuado para pieles sesibles. Calma y ayuda a revitalizar la piel. Contiene vitamina E y es hidratante y emoliente. Por ello es perfecto para el embarazo. Además desprende un olor suave y delicado muy agradable.

Es posible aplicar uno de estos aceites, varios alternando o incluso mezclar varios en un recipiente (lo ideal es que sea de vídrio de color ámbar para que los aceites mantengan másb tiempo sus propiedades). También es muy recomendable la manteca de karité natural, no refinada y de primera presión en frío. Su poder hidratante, nutritivo y regenerador lo convierte en un producto perfecto para la piel durante el embarazo. Además, es un 'after sun' natural. Su consistencia es sólida, por lo que antes de aplicarlo hay que coger una pequeña cantidad y calentarla frotando las manos.

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