Qué son los radares 'invisibles' que la DGT no quiere que localices

En 2021 se produjeron 921 siniestros mortales en las carreteras españolas en los que fallecieron 1.004 personas y otras 3.728 resultaron heridas graves. Justo antes del puente de Todos los Santos, Valladolid ya sumaba once muertes en carretera en este año, a los que se sumaron el 30 de octubre el padre y el hijo de Velliza que perdieron la vida atropellados mientras paseaban.

Uno de cada cinco accidentes de tráfico con víctimas se relacionan con el exceso de velocidad. En el 23% de los siniestros mortales, la velocidad aparece como factor concurrente, solo por detrás de las distracciones y por delante del alcohol. Circular a una velocidad inadecuada provoca un aumento en la distancia de detención, de reacción y de frenado.«Si siempre conduces a una velocidad excesiva o inadecuada, es una mera cuestión de tiempo que acabes por sufrir un siniestro», en palabras de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Las multas por exceder la velocidad oscilan entre los 100 y 600 euros, según su gravedad, y pueden acarrear la pérdida de hasta seis puntos del carnet. Hace unos días, la entidad informó que se van a destinar más de 600.000 euros a 70 nuevos radares móviles. Este tipo de radares se caracterizan porque no están en puntos concretos de la carretera, sino que se ponen ocasionalmente y son controlados por los agentes.

La DGT ha informado de la ubicación de los radares fijos, pero no ha publicado el listado de los móviles. Por ello, Socialdrive no ha dudado en desvelar la ubicación de estos radares veloláser. En concreto, Tráfico ha desplegado 81 radares 'invisibles' a lo largo de todo el territorio nacional. Castilla y León cuenta con 24 dispositivos de este tipo, siendo León la provincia que lidera el ranking con seis radares. Valladolid solo cuenta con tres.

Se trata de radares veloláser, de tipo móvil, que tienen capacidad para poder detectar todo tipo de infracciones a unos 1.200 metros, aunque puede ampliarse a los 1.500 metros. A simple vista son indetectables para los conductores, ya que pueden instalarse en una cabina lateral, en un pórtico o ir acoplados a los vehículos patrulla a través de sistema de imanes o encima de un trípode que se encuentra en la zona del arcén de la carretera. Su objetivo es evitar accidentes de tráfico y muertes en la carretera.

Este tipo de radar supera el alcance del helicóptero Pegasus, que puede detectar infracciones a 1.000 metros de distancia. Llama la atención sus reducidas dimensiones (21 centímetros de longitud, 9,8 centímetros de anchura y 31,7 centímetros de altura), además de su ligero peso de 1,6 kilogramos. Puede vigilar todo lo que ocurre en la carretera durante un intervalo de entre ocho y diez horas, pudiendo sancionar al vehículo infractor al instante.

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