Vía libre para aparcar en una cochera si no hay señal de vado

La placa de vado permanente colocada en el acceso a garajes o cocheras prohíbe aparcar delante y evita así que quede bloqueada la salida o la entrada al inmueble. Sin embargo, no todo vale para limitar el estacionamiento sino que debe estar indicado con una señalización correcta para contar con los siguientes privilegios: el derecho de entrada y salida las 24 horas del día y la modificación del bordillo de la acera para facilitar el acceso de vehículos. Por eso, no cualquier notificación de 'no aparcar' es válida para obedecerla.

Para saber que, efectivamente, esta prohibido el estacionamiento en la puerta de un garaje, el vado tiene que tener colocada la señal R-308 y con ello, se prohíbe el aparcamiento o la parada delante. En caso de obviar esta indicación, se infringe el artículo 91.2 c) del Reglamento de Circulación que establece una multa de 200 euros «cuando se obstaculice la utilización normal del paso de salida o acceso a un inmueble de personas o animales, o de vehículos en un vado señalizado correctamente».

El reglamento especifica el término «vado señalizado correctamente» porque la picaresca recurre a pintadas y 'vados' de dudosa fiabilidad que, por supuesto, no están autorizados ni son vinculantes. Para cerciorarnos que efectivamente es una señal fehaciente, la placa suele llevar un número de registro municipal, el escudo del ayuntamiento correspondiente, aclarar si es permanente o limitado e incluso un sello en seco o en relieve de la Policía Local.

La instalación del vado prohíbe también el estacionamiento del propietario, puesto que sería un reservado en la vía pública para ese ciudadano. Además, el usuario debe tener en cuenta que el peatón siempre tiene prioridad porque circula por la parte de la vía reservada al viandante, y es el vehículo el que debe ceder el paso si al entrar o salir de garaje se cruza con una persona.

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