Conoce las funciones de los conos inteligentes impulsados por la DGT

Las nuevas tecnologías quieren conquistar la carretera con el objetivo de reducir los siniestros mortales. Dentro de la 'Plataforma de Vehículo Conectado 3.0', la Dirección General de Tráfico ha querido fomentar la conectividad en la esfera de la conducción. Esta plataforma tiene como objetivo permitir a todos los usuarios que hacen uso de las vías de circulación, estar conectados para proveer y consumir información con el objetivo de detectar y recibir información sobre situaciones de peligro que puedan surgir en la carretera. Anticiparse a cualquier imprevisto que suceda para evitar nuevas imprudencias es otra de las funciones de estos nuevos accesorios viales.

Con ello, se pretende lograr una movilidad más segura e inteligente a través de tecnologías de control y señalización del tráfico con geolocalización integrada. Esta novedosa plataforma ya se probó en la prueba ciclista del Gran Fondo Ézaro- Fin do Camiño en la que los conos inteligentes proporcionaron información a la plataforma en tiempo real para evitar imprevistos y mantener la seguridad.

La principal función de los conos inteligentes es enviar información a la red cuando se ha producido un accidente en carretera o cierto tramo permanece restringido a través de los accesorios blancos instalados en el cono que sobresalen. Esto significa que cuando se inicie una obra se enviarán este tipo de conos para suministrar información. Los usuarios se mantendrán al tanto de las incidencias por la alerta que les llega al GPS.

Es una herramienta eficaz para enviar información cuando cierto tramo se encuentra cerrado al tráfico por una prueba deportiva o manifestación. De este modo, los vehículos conocerán con antelación qué zonas están restringidas o si se permite su paso una vez actualizada la información. Además, se advertirá a los conductores donde deben conducir con mayor precaución para evitar atropellos.

Junto a los conos inteligentes, la DGT también ha impulsado las balizas de los coches, que sustituirán a los triángulos de emergencia. Estos contarán con la misma tecnología que los conos. De esta forma, cuando se produzca una avería o accidente que obligue al vehículo a parar en el arcén, la baliza enviará información a la red y esta a su vez la enviará a los usuarios para que conozcan el incidente.

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