A las inclemencias meteorológicas propias del otoño y el invierno como el viento, la lluvia o la nieve, se pueden añadir otros peligros menos esperados. La DGT advierte en su web de uno de esos riesgos que pueden sobrevenir en la carretera y al que no damos tanta importancia.
Publicidad
Las hojas secas sobre el suelo comportan un peligro para los peatones, que pueden resbalar con ellas, sobre todo si el suelo se encuentra húmedo pero lo mismo suceder al volante. Una calzada mojada y cubierta de hojas puede provocar que un vehículo derrape aumentando su distancia de frenada y lo que es peor , puede hacer que el conductor de un volantazo y salga de la vía o choque contra otro vehículo. Desde la DGT apuntan a que frenar sobre una capa de hojas húmedas puede ser tan peligroso como hacerlo sobre una placa de hielo.
Pero este no es el único peligro de la vegetación sobre la carretera. Además, una calzada cubierta de hojas puede ocultar baches, agujeros e irregularidades del firme, 'falsear' los límites de la vía y dificultar la percepción de su anchura. En definitiva, ser un 'engaño' para el conductor.
Para solucionar esto no se puede hacer nada más que actuar con mucha precaución si encontramos una calzada cubierta de hojas o de vegetación y no frenar de manera brusca. Por supuesto, es importante tener los neúmaticos en buen estado.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.