

Secciones
Servicios
Destacamos
Amelia Alonso admite que «no dejas de tener miedo por todas las precauciones del mundo que cojas». Ella, dependienta de la panadería Marín, en el obrero barrio de San José de Segovia, trata de cumplir con todo el ritual de la prevención. «Cuando llego a casa me descalzo antes, me quito la ropa y la lavo», comenta. Y hasta ahora la liturgia de la desinfección y del cuidado que oficia cada vez que vuelve al hogar tras la jornada laboral le ha bendecido con un negativo en las pruebas de seroprevalencia que desarrolla el Ministerio de Sanidad para determinar la incidencia del coronavirus en la sociedad y por territorios. «Cuando me dijeron que no había dado, que el resultado había salido negativo, ¡es como si me hubiera tocado la lotería!», exclama en una mezcla de alegría y alivio.
Hace un par de viernes –recuerda– recibió un mensaje en el teléfono. Había sido una de las 1.200 personas seleccionadas en la provincia para participar en la encuesta. «Me citaban para el día siguiente», pero no le dieron mucha más información ni pistas, salvo que ella y su familia habían sido elegidos para hacerse la prueba. Solicitó más instrucciones al teléfono de contacto que le proporcionaron y la voz que le atendió al otro lado le emplazó a acudir a las nueve de la mañana al ambulatorio de Santo Tomás.
Coronovirus en Segovia
«Era sábado y cuando llegué no había nadie», relata Amelia. ¿Entonces qué? Volvió a llamar y «nos mandaron al centro de salud de San Lorenzo». Eso le cuadraba más porque es el que le corresponde por su domicilio. «Pero allí tampoco era», continúa la narración de su peripecia. Desde allí le remitieron al Hospital General de Segovia, lo que todavía le encajaba más al tratarse de una analítica, comenta.
amelia alonso, dependienta en una panadería
«Me mandaron pasar y me pincharon en el dedo». Tantas vueltas para un segundo de punción y diez minutos de espera. «Salió la enfermera y cuando me dijo que lo había pasado, ufff...», recuerda entre risas. La sanitaria que le atendió le felicitó, no era para menos porque en esos diez minutos se había quitado dos meses de preocupaciones y zozobras a costa del coronavirus.
«Trabajo de cara al público y quieras o no, aunque te pones guantes, mascarilla y tomas precauciones, siempre te queda alguna duda», reconoce. Si eres tú la que contagia a una clientela eminentemente mayor, o si el que llega a por pan te deja de 'propina' la infección. «Duermo con mi marido y claro, piensas si le puedes contagiar», añade. Ahora esas dudas y desvelos han desparecido de un plumazo, o mejor dicho, de un pinchazo. «Lo he pasado y no me he dado cuenta», destaca.
Amelia es de los casos asintomáticos que deja esta pandemia tan imprevisible como cruel. En su caso, explica que «no he tenido fiebre, ni tos, si acaso algún dolor de cabeza, pero no pensaba que fuera por esto».
De todos modos, la encuesta no había terminado. El 'gordo' de esa lotería que le había agraciado con un negativo en la prueba de seroprevalencia de la covid vendría cuando su marido, Javier, cocinero de la Casa Sacerdotal, y su hija Vanesa, también dieron negativo en el test. Pero la alegría todavía iba a ser mayor, faltaba el premio y el alivio finales. «Mi madre, que tiene 72 años vive con nosotros porque está recientemente operada de una prótesis, y pedí si a ella también le podían hacer la prueba». Así fue y el resultado reveló el cuarto negativo en coronavirus de la familia, el que más inquietaba a Amelia. «Eso fue casi lo mejor», añade emocionada.
amelia alonso, dependienta en una panadería
Ahora le toca hacer el seguimiento. La encuesta de seroprevalencia le ha reservado dos citas más. De momento, «ya llamé al ambulatorio de San Lorenzo para decirles que estaba todo bien y he tenido que hacerme unos análisis de sangre». El día 20 tiene otra citación para una nueva prueba. Y unas semanas más adelante todavía le aguarda otra.
La causalidad ha querido que el dueño de la panadería Marín, donde trabaja, también fuera seleccionado para someterse a la prueba. Y Fernando, el popular 'Falele', también puede presumir de negativo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.