La Junta ultima la reposición de cubiertas en las viviendas sociales de Nueva Segovia

No hay previsión de intensas lluvias para los próximos días y el veranillo de San Martín abrirá un paréntesis de calor después de semanas con bajas temperaturas. Esta es una buena noticia para las 64 familias que residen en las viviendas de protección oficial (VPO) del barrio de Nueva Segovia. A día de hoy, algunas de ellas mantienen colocados numerosos baldes para recoger el agua que se desliza de las goteras o plásticos para proteger los muebles de las inclemencias meteorológicas.

«Son necesarias obras de impermeabilización en las cubiertas y en la unión de estas con la fachada, espacio por el que se han llegado a meter incluso palomas y otras aves, además del frío y el agua», asegura el Foro Social de Segovia tras recoger los testimonios de los afectados. «Los vecinos están decepcionados e indignados», añade.

Las obras dirigidas a la reforma y mejora de la eficiencia energética en los doce bloques de pisos que conforman 'El Mayorazgo', en la plaza Valle Inclán; y 'La Fresneda', en la plaza Azorín, fueron adjudicadas en mayo de 2022 a la empresa CHR por importe de más de 3,4 millones de euros sufragados con fondos europeos.

Las labores tenían como objetivo optimizar la envolvente térmica para reducir el gasto, mejorar el confort y el bienestar de los usuarios y reducir las emisiones de CO2. Estas dieron comienzo pocos meses más tarde de la licitación y, en primera instancia, se derribaron las cubiertas. No obstante, pronto se comprobó que la ejecución era «anormalmente lenta» en relación a los compromisos adoptados, según la Administración regional.

Aunque en un principio se argumentó que los retrasos se debían a la absorción de la compañía por parte de URBAS, los proveedores contratados afirmaron que no les pagaban y que la adjudicataria adeudaba entre 3.000 a 10.000 euros de forma general. Ante ello, se rescindió el acuerdo firmado el pasado 3 de mayo y fue necesario tramitar un procedimiento de contratación por vía de emergencia para la terminación de la reforma de las cubiertas, con el propósito de impedir las filtraciones, por valor de más de 1,2 millón de euros.

Los trabajos, adjudicados con posterioridad a la empresa Tapias Rueda, fueron retomados de manera inmediata. En concreto, seis días después, según la Delegación Territorial de la Junta en Segovia. Y su finalización está prevista para «diciembre de 2023», informa, a la vez que confirma que las obras en curso «están ya muy avanzadas».

Las actuaciones se realizan sobre ambas infraestructuras diferenciadas, con 32 viviendas cada una, y que cuentan además con sus correspondientes garajes y trasteros vinculados, así como seis locales de uso social. Consisten fundamentalmente en la sustitución de cubiertas a dos aguas, con vertido hacia el interior, por otra de cuatro aguas con pendiente adecuada para el vertido hacia el exterior.

En este proceso, se ha sucedido una DANA que trajo consigo intensas y abundantes precipitaciones, lo que obligó a realojar a una decena de habitantes de estas viviendas en hoteles de la ciudad. Los toldos y otros materiales colocados para evitar la entrada de las lluvias no fueron suficientes. Las labores no habían concluido en algunos pisos, ante lo que las precipitaciones provocaron «humedades y daños importantes» que repercuten negativamente, hasta el momento, en la habitabilidad e incluso «en la salud» de sus ocupantes, remarcan los vecinos a través del Foro Social.

La Administración reconoció este verano que la suspensión de las obras por la primera adjudicataria provocó una «situación de precariedad» tanto en el exterior como el interior de los inmuebles, lo que se unió a la persistencia de la situación de «grave peligro» por cortocircuitos ante la existencia de goteras en techos y el deterioro del mobiliario. «Sorprende que esta situación se prolongue ya dos años, vayan aumentando las viviendas afectadas y la solución siga sin llegar», reiteran los residentes.

Por este motivo, exigen que la reparación sea «rápida y eficaz», pues hasta el momento los inmuebles «están lejos de reunir condiciones dignas de habitabilidad». No se olvidan de la «necesaria» rehabilitación de las propias fachadas y sustitución, en su caso, de la carpintería exterior. También hacen hincapié en la existencia de calderas que han quedado obsoletas o deterioradas, y extienden los desperfectos provocados por el agua a las zonas comunes y trasteros.

No es el primer comunicado que se emite para hacer visible estos perjuicios. En esta ocasión, los vecinos responsabilizan de la situación a la Junta y urgen que ponga todos los medios necesarios a disposición de las familias, para que «recuperen un hogar digno». En este sentido, el Consejo de Gobierno aprobó justo hace una semana la puesta en marcha de las obras y servicios necesarios para consolidar las fachadas de las viviendas de promoción directa.

La cuantía destinada a este cometido es de 1.560.500 euros -el 51% del montante total se corresponde con el bloque 'El Mayorazgo'- y declara de emergencia la contratación. Este presupuesto incluye la dirección de obra, redacción del proyecto final, ejecución de las labores y coordinación de seguridad y salud.

Los operarios y constructores se trasladaron al terreno para llevar a cabo las obras de urgencia este mismo martes. Los residentes y transeúntes de la zona han podido observar la continua descarga de materiales en las jornadas previas. La primera tarea que se ha desarrollado es la instalación de nuevas ventanas de aluminio y también se ha iniciado la construcción de petos en las cubiertas que son parte de las fachadas. Estos últimos son muros de pequeña altura que se ubican en el borde exterior para el remate de los tejados.

A continuación, se procederá a reparar las fachadas y cambiar las carpinterías exteriores de los pisos y portales, además de colocar el aislamiento de la separación de las viviendas con las zonas comunes y se sustituirán todas las calderas antiguas o que, tal y como critican los vecinos, han quedado dañadas.