Las llamas devoran miles de paquetes de paja en una nave en Olombrada

Fue en torno a las once de las noche cuando se dio la voz de alarma, y hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones de bomberos, entre ellos los de Segovia, Peñafiel y los voluntarios de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar, quienes regresaron durante la mañana del miércoles, a modo de retén, pues, como es habitual en estos casos, los trabajos se limitan a refrescar el entorno y controlar que las llamas no se extiendan, y esperar a que la paja arda por sí misma, lo que se podría prolongar entre cuatro días y hasta una semana, según las primeras estimaciones.

Asimismo, también a lo largo del día hasta el lugar se acercaron en distintos momentos agentes medioambientales e incluso una motobomba del servicio forestal de extinción de incendios, ya que debido al fuerte viento registrado durante la jornada, se temía que en algún momento el fuego se pudiera extender por las inmediaciones, y por si era necesario refrescar el entorno en algún momento.

El incendio ha arrasado una nave de unos 3.000 metros cuadrados que se encontraba prácticamente llena de paja, propiedad de una empresa de compra venta ubicada en Olombrada, y cuyo responsable se encontraba durante la mañana de ayer en las inmediaciones de las instalaciones.

Según manifestó, desconocía la cantidad de paja que podía haber en el interior y el valor de la misma, y apuntó que será el perito del seguro quien determine la cuantía de los daños, una vez que el incendio se dé por extinguido, lo que tardará aún varios días, debido a la gran cantidad de paquetes de paja que se encontraban almacenados en el lugar.

Durante la mañana las inmediaciones de la nave eran un continuo vaivén de vecinos, quienes se acercaban hasta el propietario de las instalaciones para mostrarle su apoyo y preocupación por el suceso, del cual se desconocen las causas, que se investigarán una vez que se sofoquen las llamas.