Segovia

El Hospital General atiende una media de 154 urgencias diarias este verano

En el estío pasa algo similar que en Navidad, pero de manera más prolongada y menos abrupta. Si en una jornada normal durante el resto del año los casos que pasan por la unidad oscilan en una horquilla media de entre 100 y 140, en fechas como las del puente de diciembre o los festivos navideños las entradas aumentan entre un 40% y un 50% y las urgencias escalan hasta más allá de las 200 asistencias prestadas en tan solo 24 horas. Estos picos, en verano, son aislados pero el ritmo frenético se sostiene más tiempo.

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Según los datos facilitados por la Delegación Territorial de la Junta en Segovia, solo entre el 21 de junio, fecha en la que empieza a descontar la estación veraniega, y el pasado 8 de agosto, ya metidos en el fragor vacacional, el complejo sanitario de referencia en la provincia de Segovia había atendido 7.688 urgencias, que ascienden a 10.659 si se toma como punto de referencia inicial el 1 de junio. Son 154 visitas atendidas diarias, lo que quiere decir que habrá jornadas más presionadas y otras con menos trajín.

Para que se hagan una idea, es como si se juntaran todos los vecinos empadronados en La Lastrilla, Nava de la Asunción y Cantalejo (suma que ronda los 10.600 habitantes) y pasaran a lo largo de los 48 días que recoge la información de la Administración por el servicio de Urgencias porque su dolencia requiere de esa inmediatez en la atención, bien sea derivados de los centros de salud o bien directamente sin previo paso por el primer nivel asistencial. El triaje de la unidad es el que determina la gravedad y la prioridad a la hora de recibir la oportuna atención.

Se preguntarán si esta intensidad de trabajo que soporta el equipo de Urgencias del Hospital General es normal cada verano. A tenor de las cifras que proporcionan los responsables de la gestión sanitaria de la provincia, este año se ha notado un leve alivio equivalente a un descenso de las visitas del 7% con respecto a la temporada estival del pasado año. En concreto, entre el 21 de junio y el 8 de agosto de 2022 los equipos de la unidad atendieron 8.290 pacientes. Sin embargo, la correcta contestación a la duda anterior va a depender de las circunstancias de cada temporada veraniega. Muchos condicionantes entran en juego, aunque la cifra de 2023 no es descabellada. No sale de ojo.

Por ejemplo, las vacaciones estivales del año pasado fueron más traumáticas. Entonces se alinearon factores que hicieron que repuntara la demanda de pacientes, provocando saturaciones y colapsos en determinadas jornadas en las que el pico de visitas a Urgencias se disparó hasta los 270 pacientes en 24 horas. A la canícula extrema y prolongada del estío de 2022 se añadieron un incremento de patologías respiratorias; la situación de un personal diezmado por las vacaciones y por la covid, que continuaba con sus estragos, y, para más inri, un primer nivel asistencial que rondaba la saturación.

Aquella presión asistencial hizo, a su vez, que hubiera personal del servicio forzado a ampliar por necesidades del guion «dos o tres horas su turno» para poder cubrir la demanda, recuerda la responsable del sindicato profesional de enfermería Satse en la provincia segoviana, Miriam Rubio.

El pasado verano, UGT también puso el grito en el cielo por la cantidad de urgencias que llegaron al complejo asistencial a raíz de la ola de calor sofocante que asfixió a los segovianos durante buena parte del mes de julio. Aquella suma de factores dejó jornadas con «entre 240 y 250» casos vistos por los profesionales de Urgencias, lo que supone al menos duplicar la carga de trabajo a la que habitualmente se enfrentan estos equipos en la época estival, que de por sí da más tarea que el resto del año.

El presente verano de 2023, en los datos de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia, no esta siendo tan agobiante, pero el servicio no tiene apenas respiro. Las cifras oficiales disgregan la cantidad de pacientes atendidos en junio, 4.478; en julio, cuando el Hospital General vio cómo aumentó la demanda asistencial hasta los 4.877 casos, y los ocho primeros días de agosto, en los que los equipos vieron 1.304 urgencias.

La progresión al alza conforme avanza esta temporada alta de trabajo en la unidad se ve mejor en la media diaria de pacientes. Junio acabó con unos 149 atenciones realizadas por jornada; julio se saldó con un promedio de 157 emergencias sanitarias a las que se prestó auxilio en el complejo de referencia en la provincia, y el inicio de agosto experimentó una vuelta más de tuerca con 163 pacientes diarios de media en la primera semana del mes.

El aumento de la presión asistencial de este estío, como el que suele producirse en estos meses vacacionales de cada verano, no deja de formar parte de la lógica. Y es que la población que recala durante este periodo en la provincia crece exponencialmente, los padrones se multiplican en los pueblos que reciben a los veraneantes y a los hijos y nietos que se reencuentran con sus raíces aprovechando el paréntesis de asueto después del curso laboral.

Si a eso se añaden una mayor actividad física; más horas fuera del 'refugio' casero; más tiempo al aire libre en contacto con la naturaleza, con lo que conlleva un mayor riesgo de sufrir, por ejemplo, picaduras; unos hábitos más relajados que pueden llegar a descuidar la coraza saludable de las personas; más excesos en la alimentación y en la bebida; más comidas y cenas fuera del domicilio, o más desplazamientos, las papeletas de sufrir alguna incidencia de salud aumentan.

En cuanto a la jornada de la semana en la que el servicio de Urgencias del Hospital General de Segovia acumula más presión asistencial durante las vacaciones de verano, la información remitida por la Administración regional revela que son los lunes, justo después del fin de semana, «con un 20% más de pacientes que la media de pacientes diarios del resto de los días de la semana».

Tres de cada diez casos que acuden a Urgencias durante los meses de verano corresponden a «causas traumatológicas», es decir, fracturas y esguinces, fundamentalmente. Además, el 7% son dolencias pediátricas. El resto son pacientes que presentan cuadros complicados al padecer múltiples patologías con «problemas de salud intercurrentes». También se ven «más gastroenteritis y alguna infección respiratoria de vías altas pero menos que en otras estaciones».

La inmensa mayoría de las entradas en Urgencias reciben la asistencia pertinente y regresan a sus domicilios sin necesidad de ser internadas. Por su parte, aproximadamente el 9% de los pacientes que acuden al servicio requieren el ingreso. La estancia media de los segovianos que pasan en verano por Urgencias es de unas tres horas, en concreto 193 minutos.

Una especialización para equipararse con Europa

El actual gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Luis Gómez de Montes, es una de las voces más activas a la hora de reivindicar una antigua demanda asistencial, que no es otra que la instauración en España de una la especialidad propia de Urgencias sanitarias. El responsable es conocedor de esta petición y de lo que supondría la implantación, ya que durante más de veinte años ha estado al frente del servicio de Urgencias del Hospital General. Echa en falta una formación «homogénea y homologada», ya que opina que de haber la especialidad se mejoraría el trabajo que ya se viene realizando al equipararse con los estándares europeos. Junto a Chipre y Portugal, España es uno de los tres países de la Unión Europea en los que la actividad de Urgencias no cuenta con el respaldo de una especialización y un programa de formación vía MIR.